El actual presidente de El Salvador, Nayib Bukele, anunció su victoria en las elecciones antes de conocer los resultados oficiales.
Con más de 1,6 millones de votos y un apoyo del 70 %, Bukele, del partido Nuevas Ideas, se proyecta como el contundente ganador en los comicios. Su competidor más cercano, Manuel Flores del FMLN, solo alcanzó 139.000 votos.
"El Salvador ha roto récords de democracias globales", afirmó Bukele al destacar su triunfo.
Esta sería la primera vez que un presidente gobernará el país por un segundo mandato consecutivo desde 1983.
Las claves fundamentales que posicionan a Bukele, considerado el presidente más popular de América Latina, en ruta hacia un resultado electoral histórico, residen en tres aspectos primordiales, según un análisis de BBC Mundo.
1. Mayor seguridad (entre denuncias de violaciones de derechos humanos)
Bukele ha ganado reconocimiento por su enfoque en la seguridad, logrando reducir la violencia en El Salvador, que alguna vez fue considerado uno de los países más violentos del mundo.
Desde su decreto de emergencia en 2022, más de 75.000 sospechosos de pandilleros han sido detenidos, desarticulando a los grupos delictivos y mejorando la seguridad en el país. Sin embargo, estas medidas han sido criticadas por violaciones a los derechos humanos.
"El éxito en la lucha contra las pandillas ha implicado sacrificios en términos de derechos humanos", señaló Bessy Ríos, analista política.
El 23 de agosto del pasado 2023, Bukele liberó a 7.000 detenidos inocentes que habían sido apresadas durante el régimen de excepción, lo que generó más controversia en relación con el respeto de los derechos humanos.
2. Alta popularidad y "cambio de imagen" para el país
A pesar de las críticas, Bukele sigue siendo el presidente más popular de América Latina, con un 90 % de aprobación.
Su gestión llevó a una transformación de la imagen del país a nivel internacional, siendo el primero en adoptar el bitcoin como moneda legal y atrayendo grandes eventos a El Salvador. Estos factores han contribuido a su popularidad y al reconocimiento internacional.
Sin embargo, Bukele aún enfrenta el desafío de mejorar la economía del país, especialmente a través del impulso al turismo.
A pesar de la construcción de mega-proyectos financiados por China, como el nuevo Estadio Nacional y una Biblioteca Nacional de vanguardia, la población todavía experimenta dificultades económicas, con un 48 % sufriendo inseguridad alimentaria debido a los altos precios.
3. Una oposición al borde de la extinción
El éxito de Bukele en su primer mandato se vio facilitado por una oposición fragmentada y sin capacidad de competir.
Su liderazgo rompió con el bipartidismo tradicional, dejando a los contrincantes muy rezagados en los resultados electorales.
Cambios en la Asamblea Legislativa, que redujeron la cantidad de diputados y favorecieron a los partidos mayoritarios, junto con la falta de financiamiento para las campañas de la oposición, debilitaron aún más la competencia.
Las encuestas revelaron que entre el 65 y 85 % de la población reconocía no conocer a los otros cinco candidatos que se presentaban como alternativa presidencial a Bukele.
Con información de BBC