Jimmy Chérizier, alias Barbecue, líder de la coalición criminal Viv Ansanm, escapó de los operativos policiales del sábado en Bas Delmas, su bastión en Puerto Príncipe, y en un video dijo que estaba vivo, aunque nadie dijo oficialmente lo contrario, y advirtió sobre una respuesta armada con el uso de drones.
El primer ministro de Haití, Alix Didier Fils-Aimé, informó que varios integrantes de pandillas fueron abatidos durante la operación y que se mantienen acciones de seguridad a gran escala en la zona.
Chérizier desestimó el impacto del operativo y amenazó con emplear drones explosivos para atacar a las fuerzas oficiales, haitianas y extranjeras, asegurando que puede acceder a las mismas armas con las que cuenta la policía haitiana.
El líder criminal afirmó que su organización ya está movilizada y que cuenta con aliados en el extranjero, así como con recursos financieros para adquirir armamento avanzado.
En su mensaje, Chérizier recordó el asesinato del expresidente Jovenel Moïse, insinuando que en Haití cualquier figura pública podría ser blanco de un ataque.
Este ex oficial de policía convertido en poderoso líder de pandillas ha sido una figura central en enfrentamientos entre pandillas y fuerzas de seguridad.
Vestido de negro, Chérizier desestimó las afirmaciones del gobierno sobre un ataque a su bastión y preguntó a personas fuera de cámara (a las que se refirió como sus “soldados”) si se había llevado a cabo una operación. Las voces de fondo respondieron que no había ocurrido tal cosa.
Chérizier se burla en el audiovisual de la ofensiva del gobierno y afirma que tiene acceso a los mismos drones y municiones nuevas que las autoridades utilizaron en el supuesto ataque.
Continúa la inestabilidad en Puerto Príncipe
La operación se produce en medio de una creciente violencia de pandillas en Puerto Príncipe, donde los grupos armados han reforzado su control sobre varias partes de la capital.
La coalición de bandas que dirige Barbecue controla grandes sectores de la capital y ha reforzado su control sobre barrios clave mediante una violencia brutal con un sinnúmero de matanzas de civiles y gracias a alianzas estratégicas con diversos sectores, algunos vinculados al poder políticos y económico, según las denuncias.
Ni siquiera los hospitales ni las escuelas se han salvado de la ofensiva delictiva en sus asaltos a bancos, comisarías y subestaciones de policía.
Compartir esta nota
Sigue leyendo
{{#volanta}}{{volanta}}{{/volanta}}