Rusia y Ucrania han llevado a cabo un nuevo intercambio de prisioneros de guerra el jueves. Se trata del único avance concreto de las recientes conversaciones de paz en Estambul, ahora estancadas. Mientras el territorio ucraniano sufrió nuevos ataques, el presidente ucraniano Volodímir Zelenski expresó su esperanza de convencer a Donald Trump de que sancione a Moscú durante la cumbre del G7, prevista en Canadá del próximo domingo al martes.
Las autoridades ucranianas y rusas anunciaron el jueves 12 de junio el intercambio de un tercer grupo de prisioneros de guerra con Rusia, en lo que va de semana. Se tratan de prisioneros enfermos o seriamente heridos.
“Hoy, los guerreros de nuestras Fuerzas Armadas, Guardia Nacional y Servicio de Guardia de Fronteras están de vuelta en casa”, escribió el presidente ucraniano Volodímir Zelenski en su cuenta X, sin comunicar el número exacto de personas que se habían canjeado.
“Todos ellos requieren tratamiento médico, y sin duda recibirán la atención que necesitan”, explicó Zelenski.
Del lado ucraniano, los militares heridos llegaron en ambulancias, algunos con las piernas amputadas y transportados en sillas.
Por su parte, el Ministerio de Defensa ruso confirmó en la mensajería Telegram el intercambio y anunció que los prisioneros liberados están recibiendo asistencia médica y psicológica en Belarús, antes de ser enviados a territorio ruso.
“Reciben la asistencia psicológica y médica necesaria”, añadió en Telegram.
El lunes 9 de junio, Rusia y Ucrania ya habían procedido al intercambio de un primer grupo de prisioneros de guerra menores de 25 años. Otros habían sido liberados el martes mientras que el miércoles, Rusia entregó a Ucrania 1.212 cadáveres de soldados ucranianos, recuperando por su parte 27 restos mortales de militares rusos.
Zelenski planea hablar con Trump en la cumbre del G7
Los intercambios de prisioneros y cuerpos de soldados muertos constituyen el único punto acordado desde que las delegaciones ucranianas y rusas han empezado hablar en Estambul, Turquía.
Aparte de este punto, las negociaciones siguen estancadas, ya que las exigencias rusas, en particular sus reivindicaciones territoriales, han sido consideradas inaceptables por la parte ucraniana. Por el otro lado, Rusia siempre ha rechazado las propuestas de Kiev de cese al fuego previo a las discusiones.
El presidente Zelenski a menudo reprochó a Rusia no querer realmente la paz, pidiendo al mismo tiempo que sus aliados ejerzan más presión sobre Moscú.
El jueves, el mandatario ucraniano dijo esperar reunirse con Donald Trump en el marco de la cumbre de G7 prevista en Kananaskis, Canadá, del domingo 15 al martes 17, para pedir más presión por parte de Estados Unidos sobre Rusia.
Volodímir Zelenski afirmó que quería pedir un “diálogo” entre ucranianos, europeos y estadounidenses para “encontrar un terreno común” sobre “la aplicación de sanciones severas” contra Rusia.
Sin embargo, Donald Trump, se ha mostrado reacio a imponer nuevas sanciones estadounidenses contra Rusia, argumentando que esto podría frustrar el éxito de las conversaciones de paz
Por su parte, el ministro de Defensa alemán, Boris Pistorius, de visita en Kiev el jueves, anunció el desbloqueo de una nueva ayuda militar de 1.900 millones de euros para apoyar a Ucrania contra Rusia, lo que llevaría esta suma a 8.900 millones, con los 7.000 millones de euros ya previstos.
“No es sólo una guerra defensiva de Ucrania contra Rusia, es una batalla defensiva en la que Ucrania lucha por la libertad, la seguridad y la paz en Europa en general. Por eso es nuestra tarea conjunta apoyar ahí donde podamos”, insistió el ministro alemán.
Nuevos ataques rusos con drones contra Járkiv
En la noche del miércoles al jueves, 14 personas resultaron heridas en Járkiv, en el noreste de ucrania, en nuevos ataques con drones rusos. La noche anterior, tres personas murieron y unas sesenta resultaron heridas en la ciudad.
Desde hace varios días, Rusia intensificó sus bombardeos contra el territorio ucraniano. Moscú mantiene que sus ofensivas contra Ucrania se dan en respuesta a estos operativos militares del país enemigo.
En este contexto, Járkiv, la segunda ciudad más grande de Ucrania, sufrió ciertos de sus peores ataques desde el inicio de la guerra en febrero de 2022, en particular el pasado 7 de junio.
Al mismo momento en Rusia, un niño de dos años murió por un ataque con drones ucranianos en la región fronteriza de Belgorod, según anunciaron las autoridades regionales
Por otra parte, el Ejército ucraniano indicó haber golpeado una fábrica de componentes electrónicos para armas y equipos de alta tecnología, en la región de Moscú.
Con Reuters, AFP y EFE.
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