El Gobierno británico anunció este jueves la detención del primer grupo de migrantes que será devuelto a Francia bajo un plan piloto acordado el mes pasado con París. El programa, que busca reducir los cruces irregulares del Canal de la Mancha en pequeñas embarcaciones, contempla el retorno de migrantes considerados no aptos para solicitar asilo en el Reino Unido, a cambio de aceptar desde Francia a un número equivalente con prioridad humanitaria.
Las autoridades fronterizas británicas detuvieron al primer grupo de migrantes en el marco de un plan piloto que enviará de regreso a Francia a algunos de los que crucen el Canal de la Mancha en pequeñas embarcaciones.
Los migrantes, detenidos el miércoles —día en que entró en vigor el programa—, permanecerán en centros de detención migratoria hasta que sean devueltos a Francia, explicó el ministerio del Interior británico.
“Esto envía un mensaje a todo migrante que esté considerando pagar a bandas del crimen organizado para ir al Reino Unido: estarán arriesgando su vida y tirando su dinero si se suben a una lancha”, afirmó la ministra del Interior, Yvette Cooper, en un comunicado.
El primer ministro Keir Starmer y el presidente francés Emmanuel Macron presentaron el acuerdo el mes pasado. Una medida para contener el aumento sin precedentes de cruces irregulares por el Canal de la Mancha, situación que ha provocado malestar en el Reino Unido y ha contribuido al crecimiento del partido de extrema derecha Reform UK.
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El programa piloto, que se extenderá hasta junio de 2026, contempla que los migrantes irregulares que lleguen a costas británicas sean detenidos y devueltos a Francia si se considera que no son aptos para solicitar asilo. Esto incluiría a quienes hayan pasado por un "país seguro" antes de llegar al Reino Unido, según estipula la hoja informativa del ministerio del Interior.
Londres aceptará un número igual de migrantes desde Francia que podrán solicitar una visa para ingresar al Reino Unido a través de una plataforma en línea, dando prioridad a nacionalidades más vulnerables ante las redes de tráfico y a personas con vínculos en el país.
Los aprobados tendrán un período de tres meses para ingresar al Reino Unido y solicitar asilo.
Según los críticos, el programa no servirá para disuadir a los migrantes, ya que solo se devolverá a un número muy pequeño de personas a Francia y, además, el acuerdo tiene vacíos legales que permitirán que muchos de los que lleguen ilegalmente al Reino Unido se queden en el país mientras solicitan protección por motivos de derechos humanos.
Con AP y AFP
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