El Consejo Nacional de la Magistratura conocerá este viernes las propuestas del presidente de la República, Luis Abinader, para la designación de la nueva o el nuevo Procurador General de la República, que se siente en el despacho que durante más de cuatro años ha ocupado la magistrada Miriam Germán Brito.

La expectativa es poderosa sobre en cuál dirección irá el presidente de la República. Si decide, como luce con tanta evidencia, ratificar que sea un miembro titular del Ministerio Público, o que sea alguien externo, aunque del ámbito jurídico con reconocimiento y pulcritud.

En la rueda de prensa del pasado lunes, el presidente presentó a los órganos del poder ejecutivo que trabajan contra la corrupción, y ratificó que en esta administración ese esfuerzo continuará, razón por la cual creó mediante decreto la Comisión Presidencial para establecer el Sistema Nacional de Transparencia y Anticorrupción, encabezado por la doctora Milagros Ortiz Bosch, presidenta de la Comisión Nacional de Ética e Integridad Gubernamental.

Transparencia Internacional dio a conocer la pasada semana su informe anual de percepción de corrupción en el mundo, y la República Dominicana aparece mejorando significativamente sus índices de percepción, hasta lugares que nunca antes había obtenido.

La espera vale la pena, y es muy posible que no haya grandes sorpresas en las decisiones que el viernes adopte el Consejo Nacional de la Magistratura.

Lo que sí hay que reconocer es la extraordinaria labor desarrollada por la magistrada Miriam Germán Brito, su pulcritud y rectitud para llevar al Ministerio Público hacia unos niveles nunca antes alcanzados en respeto a las normas y en cumplimiento del deber. Algunos cambios no les fueron posible, por encontrarse en minoría en los órganos bajo su dirección, pero su verticalidad y respeto por los mecanismos de gobierno interno así lo reflejan, y corresponderá a la nueva dirección del Ministerio Público impulsar los cambios que Miriam Germán no pudo llevar a cabo.

La impronta, sin embargo, es ejemplar. La verticalidad y el trabajo en equipo fueron los pilares más relevantes. Haber recibido un Ministerio Público desarticulado y al servicio de intereses particulares, implicaron gran sacrificio para conducirlo hacia la rectitud, la seriedad, la verticalidad y la independencia, como valores esenciales del rol que corresponde, denunciando y sometiendo a los sujetos identificados en los más diversos actos de corrupción contra la sociedad dominicana.

Nuestro reconocimiento y gratitud a Miriam Germán Brito por el trabajo realizado, y por su innegable sacrificio para culminar con hidalguía su carrera judicial y en el Ministerio Público. Le deseamos un provechoso descanso, para ella y para su familia, muy especialmente para Orlando Emilio López Germán, su hijo de características especiales.