Víctima de un cáncer de páncreas, falleció este miércoles a los 88 años el juez estadounidense Frank Caprio, conocido por su buen humor, humanitarismo y creencia inquebrantable en la bondad del hombre, famoso entre los dominicanos luego de que rebajó la multa a un compatriota que escuchaba bachata a alto volumen.
El juez titular del Juzgado municipal principal en Providence, del estado de Rhode Island de EEUU, fue invitado tras ello al Festival Mundial de Bachata, ADN Bachata World Festival, por Carlos Rodolí Conde, presidente de la Asociación de Hoteles y Empresas Turísticas del Norte (Ashonorte), quien cursó la invitación conjuntamente con ADN Films.
El juez Caprio se convirtió en una figura querida no solo en su país, gracias a sus decisiones llenas de empatía y justicia en los tribunales.
"El juez más amable del mundo" hizo que Cleury González, quien había recibido una multa de 500 dólares por supuestamente poner la música a alto volumen, pasara a ser conocido con el apodo de "Dominican Dancer" luego de que en su audiencia el juez Caprio le preguntara qué tipo de música escuchaba.
González respondió sonriente: "bachata, una bachatica". Intrigado, el juez repitió lentamente: "ba-cha-tá", y bromeó sobre si eso se bailaba y el dominicano se lo demostró y logró una muklta mucho menor:
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