La Segunda Sala de la Cámara Penal de la Corte de Apelación del Distrito Nacional, dictó libertad pura y simple para el cubano Julio César Llorente López, quien agredió a un agente de tránsito.
Los jueces motivaron su decisión alegando que el arresto de Llorente López se produjo de forma ilegal.
El tribunal explicó que la autoridad debió requerir la orden de arresto correspondiente y no de la manera que lo hicieron, señalando que fue previo al arresto que los agentes dieron parte al Ministerio Público para que lo autorizara.
Durante la audiencia Llorente López narró sobre cómo sucedió su apresamiento y aprovechó la oportunidad para pedir disculpas ante el tribunal, afirmando que su reacción se debió “a la mala práctica ilegal del agente policial”.
Cronología del proceso
El incidente ocurrió el miércoles 9 de agosto a las 11:00 de la mañana. Al día siguiente, Julio César Llorente López fue detenido por agentes de la Policía Nacional cuando llegaba a su residencia en la calle Del Carmen, del Ensanche Naco, Distrito Nacional.
El viernes 11 de agosto la jueza Milagros Ramírez, de la Novena Sala de la Cámara Penal del Distrito Nacional, aplazó para el lunes 14, a las 11:00 de la mañana, el conocimiento de recurso de habeas corpus en favor de Llorente López, debió a que el Ministerio Público y las autoridades de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett) no acudieron a la audiencia.
El sábado 12 de agosto, Llorente López no acudió a la audiencia de solicitud de medida de coerción, a razón de que se encontraba recluido en un centro de salud a causa de unos golpes recibido en el destacamento de Villas Agrícolas por parte de otro detenido.
Ese día su representante legal, José Martínez Hoepelman, manifestó que el ciudadano cubano le comunicó sentirse arrepentido de su reacción ante el agente de la Digesett.
Posteriormente, el lunes 14, la Novena Sala Penal del Distrito Nacional rechazó el recurso de habeas corpus depositado por la defensa de Llorente López.
La jueza Katherine Rubio tomó la decisión debido a que la Oficina Judicial de Atención Permanente del Distrito Nacional está apoderado de la medida de coerción pendiente contra Llorente López.
Mientras que el 15 de agosto fue aplazado el conocimiento de la solicitud de medida de coerción a los fines de que esté presente el segundo teniente de la Policía que detuvo a Llorente López.
El 16 de agosto el juez de la Oficinas Judiciales de Servicios de Atención Permanente del Distrito Nacional dictó tres meses de prisión preventiva contra el cubano.
Ya para el 17 agosto, una organización de cubanos residentes en el país pidió perdón a la sociedad dominicana por la agresión de Julio César Llorente López a un oficial de la Digesett, a la vez que solicitó la revisión de su prisión preventiva al considerar que su vida corre "grave peligro de ser recluido en la cárcel de Najayo".