Desde su llegada a la Presidencia, en agosto del 2020, el presidente Luis Abinader ha enfocado su mirada en reforzar la política migratoria, con énfasis en la migración de haitianos hacia la República Dominicana. Esta decisión, si bien es controversial y genera debates, también le ha merecido al gobernante el apoyo de sectores de la sociedad dominicana, sobre todo del segmento más conservador.
El presidente Luis Abinader ha impulsado varias acciones, que va desde la construcción de una verja perimetral en la frontera dominico-haitiana (a la que se ha evitado desde el gobierno llamarla "muro", por la carga negativa de esta palabra), la compra de equipos militares y tecnología para la vigilancia en la zona, mejoría de las condiciones del personal que ofrece servicio allí, así como el reforzamiento de la política internacional.
Construcción del muro
El 27 de febrero del 2021 el presidente Abinader anunció la construcción de una verja perimetral de 14 mil 597 kilómetros en los puntos más conflictivos de la frontera entre la República Dominicana y Haití.
Las motivaciones para la construcción de la obra ofrecidas por el gobierno incluyen el reforzamiento de la seguridad en la zona, además de buscar un mayor control y supervisión de los tráficos lícitos como ilícitos.
“El sistema de verja perimetral inteligente pretende integrar verja física, sistema de iluminación, centro de mando y control, sensores de movimiento, cámaras de video vigilancia, radares, torre de comunicación y de vigilancia, unidades aéreas no tripuladas, entre otras soluciones tecnológicas y de infraestructura a lo largo de la línea fronteriza”, ha indicado la Presidencia de la República.
La línea divisoria que se levanta con Haití se levanta con una inversión de RD$1,700 millones, y la misma está a cargo de la Constructora Consorcio COFAH.
La primera etapa del proyecto incluyó 54 kilómetros con hormigón armado y estructura metálica, 19 torres de vigilancia y control, 10 puertas de acceso para patrullaje y 54 kilómetros de caminos para vigilancia y mantenimiento a ambos lados.
Mientras que una segunda etapa sería continuada completando una extensión de 173 kilómetros, de un total de 391.6 kilómetros que constituye la línea fronteriza.
Compra de equipos
Como parte de lo que definió como un "robusto equipamiento militar para garantizar la seguridad en la frontera con Haití", este domingo, el presidente Abinader anunció la creación de un Comando Sur de la Fuerza Aérea, en Barahona.
Esto incluye “la mayor compra de equipamiento militar de la historia” por parte de los gobiernos dominicanos a partir de 1961, en el que incluye seis helicópteros Huey II y diez nuevas aeronaves para reconocimiento y vigilancia.
También serán adquiridos 21 vehículos blindados de transporte de personal, de última generación, de la marca URO, modelo Vamtac, ST5, con capacidad para transportar 9 efectivos y dotados de armas automáticas para autodefensa.
Asimismo, cuatro camiones antimotines para modernizar la flotilla del Ejército de República Dominicana, así como la actualización y modernización de los equipos de radioayuda para la navegación aérea y luces de la pista de aterrizaje de la Base Aérea de San Isidro.
En la Base de San Isidro de la FARD también se construirá una nueva Torre de Control.
Condiciones del personal fronterizo
Las medidas de equipamiento anunciadas por el mandatario dominicano fueron acompañadas de otras acciones para mejorar las condiciones de vida y de trabajo de los soldados que prestan servicio a lo largo de la línea fronteriza.
En efecto, a partir del próximo mes, los integrantes de los batallones 10,11, 14 y 16 de Infantería recibirán un incentivo extraordinario mensual de RD$3,500 adicionales a su salario y a los beneficios que reciban en la actualidad.
Mientras que a partir del mes de enero todos los soldados que se realisten tendrán un incremento salarial de 5%, válido para fines de retiro y como un reconocimiento a sus años de servicio al país, y en su condición de espina dorsal de nuestras Fuerzas Armadas.
Abinader también dijo que construirán un nuevo complejo habitacional para alojar 400 nuevos soldados y anunció la remodelación de la fortaleza Beller, en Dajabón, asiento del Décimo Batallón de Infantería de la 4ta.
Y la Brigada del Ejército de República Dominicana constará de un nuevo hangar para helicópteros y vehículos blindados, comedor, salón multiusos y otras facilidades adecuadas a este tipo de instalaciones.
Política Internacional
Actualmente, Haití se encuentra sumergido en una crisis económica, política y social que se agravó tras la muerte del presidente Jovenel Moïse en julio del 2021.
Ante la realidad del vecino país, República Dominicana insistió recientemente ante el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas sobre la necesidad de mejorar el apoyo internacional en materia de seguridad a la Policía Nacional haitiana, en sus esfuerzos para combatir los altos niveles de violencia en ese país.
El canciller Roberto Álvarez destacó que el gobierno dominicano considera que las gestiones de estabilización en Haití tienen que estar enfocadas, como ha repetido en numerosas ocasiones Abinader, en la pacificación inmediata y en el diálogo político como únicas vías adecuadas para enfrentar la violencia y el caos.
Pero ya en junio de este mismo año, durante su participación en la IX Cumbre de las Américas realizada en Los Ángeles, el propio presidente Abinader había recriminado a la comunidad internacional la poca actuación respecto a la situación de violencia en Haití, en donde las pandillas armadas han tomado las calles de Puerto Príncipe y otras ciudades.
"Es para mi y nuestro gobierno injustificable que esta comunidad de naciones permita que un Estado, en el medio del continente americano, tenga gran parte de su territorio controlado por bandas criminales", dijo en ese momento.
Prohíbe entrada al país de Claude Joseph
El pasado 8 de septiembre, el presidente Abinader prohibió la entrada a la República Dominicana al ex primer ministro interino y excanciller de Haití, Claude Joseph.
En la orden del presidente dominicano también se prohíbe la entrada a reconocidos jefes de las bandas armadas que operan en Haití imponiendo el terror en sus conciudadanos.
La decisión fue tomada por considerar que los continuos ataques y críticas de Joseph constituyen una amenaza a los intereses e instituciones de la República Dominicana.