El catedrático universitario y especialista en ciberseguridad, Osvaldo Larancuent, señaló que la recién aprobada ley del DNI, la ley 01-24, que crea la Dirección Nacional de Inteligencia, no debería generar ambigüedades, dejando espacios a "brechas".
"La Constitución de la República establece claramente que incluso en estados de excepción, como es el artículo 266, debe de seguirse el debido proceso de recibir la autoridad de un juez competente para esos fines. Por lo tanto, en lo que deriva de esos derechos debería de estar contenido en el texto, no generar ambigüedades para que el juez vaya directamente y además el organismo tenga las limitaciones y restricciones desde la misma ley", aseguró Larancuent.
Larancuent, quien también es presidente de Internet Society en el país, expresó su preocupación durante una entrevista en el programa de televisión El Día. En sus declaraciones, el experto resaltó la importancia de abordar el tema de la ciberseguridad en relación con la nueva ley.
"Sin dudas necesitamos unas autoridades que estén empoderadas para asegurar el correcto cumplimiento de la ley, específicamente de los que delinquen, pero en muchas ocasiones esto entra en una zona gris en el que también pueden ser víctimas personas que no han delinquido y por el cual acceden a la información", afirmó Larancuent.
El especialista recordó que República Dominicana ha sido pionera en la creación de un marco legal para la ciberseguridad, con leyes como la de Comercio Electrónico y la de Crímenes y Delitos de Alta Tecnología.
Sin embargo, expresó su preocupación por el artículo 11 de la nueva ley del DNI, que permite la recolección de datos sin autorización judicial.
"Esta ley aunque protege los datos de las personas, el tratamiento, almacenamiento, registro y transmisión, lo hace desde el punto de vista del sistema financiero, pero ese no es el único sector que captura datos", declara el especialista.
El experto también señaló que existen leyes y regulaciones que protegen la privacidad de los datos personales, pero destacó que el cifrado de extremo a extremo es una medida crucial para garantizar la seguridad de las comunicaciones.