Un esquema es una representación gráfica que se utiliza para expresar los conceptos principales de una temática, con el fin de comprenderlos o estudiarlos. Suele realizarse tras la lectura y el subrayado de las ideas principales de un texto y resulta una manera simple y clara de analizar y organizar conceptos a través de palabras y recursos gráficos. Es una herramienta útil y versátil para la organización y presentación de información de manera gráfica, clara y coherente, utilizando conceptos clave y sus relaciones, es decir, una forma de organizar la información de manera jerárquica y lógica, para que sea más fácil de entender. Es una representación visual de la estructura de un contenido o documento que puede ayudar a comprender, memorizar y sintetizar un tema o texto. Por eso, también se define como una herramienta de estudio y de organización de la información sumamente útil, ya que da una visión general del tema a estudiar a través de una síntesis y permite al lector memorizar de manera visual las ideas principales.

Los esquemas pueden tomar varias formas, pero todos tienen en común que presentan la información de manera estructurada y ordenada. Tienen varios usos prácticos en diferentes áreas, para facilitar la comprensión de la información y mejorar la comunicación de ideas complejas. Constituyen una herramienta útil para cualquier persona que necesite presentar información de manera organizada y fácil de entender.       En algunos esquemas se utiliza el término outline para referirse a uno de manera más específica, especialmente en la redacción de textos académicos o de investigación. Pero los esquemas pueden tomar muchas formas, desde diagramas de flujo hasta mapas mentales, aunque todos tienen en común que presentan la información de manera estructurada y ordenada. Existen diversas técnicas para crear esquemas. Entre las más comunes están las siguientes: 1. Brainstorming o lluvia de ideas, para generar y organizar conceptos. 2. Diagramas de flujo, para representar procesos y secuencias de manera visual. 3. Mapas mentales, para relacionar ideas y conceptos de manera no lineal. Mientras que entre sus usos prácticos están: 1. Facilitar la comprensión de la información.  2. Organizar el contenido de manera clara y lógica. 3. Mejorar la comunicación de ideas complejas. 4. Ayudar en la toma de decisiones. 5. Presentar una estructura lógica y coherente, que puede ser lineal, radial, cuadro sinóptico, mapa conceptual, etc.

Como características un esquema presenta: 1. Información de manera clara y directa, siguiendo un criterio para que pueda ser interpretada de forma simple y rápida. 2. Incluye los conceptos fundamentales de una temática y sus principales relaciones. No debe tener en cuenta detalles o información irrelevante. 3. La información debe ser visualmente atractiva para ser absorbida por el lector de manera eficaz. 4. Grafica las ideas principales de una temática. 5. Resulta una herramienta eficaz en la comprensión y estudio de un tema.

Los pasos para realizar un esquema sobre el contenido de un texto son: 1. Leer comprensivamente el escrito. En este primer paso se utilizan todas las fuentes disponibles de donde se obtendrá la información. 2. Subrayar las ideas principales. Se resaltan las ideas del texto que permitan comprender la temática de estudio; también se pueden subrayar ideas secundarias, terciarias, datos o conceptos que se consideren necesarios. 3. Elegir palabras clave. De las ideas principales se obtienen los conceptos o frases cortas más representativos de la temática. Se deben omitir detalles, porque una de sus características es que sea sintético y breve. 4. Determinar qué tipo de esquema se va a utilizar. Es recomendable realizar uno propio, porque el proceso de resumir y organizar la información es beneficioso para la comprensión y memorización del tema. 5. Relacionar las ideas. Se recomienda tomar nota de las ideas y el orden en que serán relacionadas o clasificadas para luego colocarlas en el esquema. 6. Graficar el esquema. Es importante tener claro el orden de la información y el contenido a incluir. En una temática amplia o compleja se pueden hacer varios esquemas para graficar diferentes subtemas. Se recomienda usar letras mayúsculas para recalcar los conceptos fundamentales y minúsculas para los elementos contenidos en ellos. Ciertos recursos gráficos como recuadros, líneas, flechas, llaves, letras o barras pueden incluirse en el esquema para facilitar su elaboración y comprensión. Ejemplos de esquemas – Search (bing.com)

Un mapa conceptual es un diagrama que ayuda a entender un tema al visualizar las relaciones entre las ideas y conceptos que lo conforman. Por lo general, las ideas son representadas en cajas o nodos estructurados jerárquicamente y se conectan con palabras de enlace sobre las líneas para explicar las relaciones. Se centra en conceptos clave en lugar de un texto detallado, lo que permite una representación más visual y general de las ideas. Es más útil para simplificar y resumir conceptos y relaciones complejas. Se utiliza también, para fomentar la comprensión global de un tema.  Además, una de sus mayores ventajas es que cada usuario puede encontrar diferentes conceptos y relaciones acerca de un mismo tema, lo que permite desarrollar la creatividad y llevar a cabo una construcción propia del conocimiento. Por otro lado, puede ayudar a los alumnos a sintetizar información de tal forma que crear uno puede ser de gran ayuda al estudiar para un examen. El mapa conceptual es un diagrama que ayuda a entender un tema específico al visualizar las relaciones entre las ideas y conceptos. Por lo general, las ideas son representadas en nodos estructurados jerárquicamente y se conectan con palabras de enlace sobre las líneas para explicar las relaciones. A los mapas conceptuales también se les llama diagramas conceptuales. Si bien otros tipos de diagramas lucen similares, los mapas conceptuales tienen características específicas que los diferencian de otras herramientas visuales.

Los mapas conceptuales pueden ser una potente herramienta para la educación, ya que permiten a los estudiantes trabajar en niveles cognitivos más altos y ayudan a los docentes a explicar temas complicados y a evaluar la comprensión de los alumnos. Los estudiantes pueden usar los mapas conceptuales para: 1. Organizar y estructurar material nuevo. 2. Aumentar el aprendizaje relacionando conocimiento nuevo y antiguo. 3. Planificar o resumir proyectos escritos. 4. Diseñar sus propias representaciones del conocimiento. 5. Realizar una lluvia de nuevas ideas. 6. Tomar notas. 7. Crear guías de estudio. 8. Diseñar estructuras complejas.

Los docentes pueden usar los mapas conceptuales para: 1. Planificar el plan de estudios. 2. Evaluar o detectar problemas de comprensión en los alumnos. 3. Explicar ideas complejas. 4. Ayudar a los que leen con dificultades. Cuando los docentes incorporan mapas conceptuales en su metodología de enseñanza, pueden aportar recursos que ayuden a que el proceso sea más fácil para los estudiantes: 1. Presentar una pregunta de enfoque como disparador. 2. Crear una lista de conceptos clave para ayudar a los estudiantes a determinar qué incluir en sus mapas. 3. Ofrecer propuestas de mapas de expertos para que los estudiantes los utilicen como modelos. Estos son pequeños mapas conceptuales iniciados por expertos en el tema, que luego pueden ser ampliados por los alumnos.

Los mapas conceptuales son especialmente útiles como herramientas de evaluación. Por ejemplo, los maestros y profesores pueden hacer que los estudiantes creen un mapa al principio del ciclo escolar con el fin de evaluar el conocimiento existente. Los estudiantes pueden repetir esta actividad durante el período académico para que tanto alumnos como maestros puedan evaluar qué se está aprendiendo. Ayuda a evaluar la capacidad cognitiva, ya que decidir cuáles enlaces cruzados son los más importantes para incluir requiere un alto rendimiento cognitivo. Esta actividad también puede usarse para identificar y corregir los conceptos erróneos que puedan tener los estudiantes.  Los conceptos se definen como patrones o regularidades percibidas en eventos u objetos, o registros de eventos u objetos designados por una etiqueta se representan con figuras en el diagrama. Las frases o palabras de enlace se ubican en las líneas que conectan objetos en un mapa conceptual, y estas palabras describen la relación entre dos conceptos. Son lo más concisas posibles y, por lo general, contienen un verbo. Las proposiciones son declaraciones significativas que contienen dos o más conceptos conectados mediante palabras de enlace. Los conceptos y las proposiciones son las bases de la creación de conocimiento nuevo.

En esencia, un mapa conceptual expresa visualmente un conjunto de proposiciones sobre un tema determinado. Un elemento clave del mapa conceptual es su estructura jerárquica. Los conceptos más generales e inclusivos se ubican en el sector superior del mapa y los conceptos más específicos y exclusivos se colocan de forma jerárquica más abajo. De este modo, los mapas conceptuales se diseñan para ser leídos de arriba abajo. Una pregunta de enfoque define el problema que el mapa conceptual debe resolver. El desarrollo de una pregunta de enfoque permite realizar el diseño con un contexto en mente, y así ayuda a guiar y mantener la dirección del mapa conceptual. Dentro de la estructura jerárquica, la pregunta de enfoque debería estar en la parte superior del mapa y actuar como punto de referencia. Antes de comenzar un mapa conceptual, puede ser útil crear una lista que identifique los conceptos clave que deben incluirse. Establecer una lista ordenada por categorías, desde el concepto más general hasta el más específico. Esta lista se denomina estacionamiento, ya que moverá los elementos al mapa a medida que se descubra la ubicación apropiada.  Los enlaces cruzados son relaciones entre conceptos que pertenecen a diferentes dominios del mapa. Tanto los enlaces cruzados como la estructura jerárquica facilitan el pensamiento creativo, y estos enlaces cruzados a menudo indican momentos de creatividad. Ejemplos de mapas conceptuales – Search (bing.com)