La vida nos golpea a cada rato, nos decepciona, nos pone pruebas,

nos espίa para ver si estamos todavía parados, todavía en el camino.

La vida no es solo un baile sin fin, una aventura hermosa

por canoa. Viene acompañada por la corriente de resaca

que te llevará al alto mar. ¿Cómo evitarlo? Fluye. Acepta

la decepción, el rechazo. Acepta que el destino te tiene

en sus manos y no puedes resistirlo. Y cambia la vίa. Enfoca

en otra cosa. Juega. Dile al destino que una bofetada

no te va a matar. Escribes bien. Escribe para la historia.

La nueva voz que nos salvará con su canto y su arte

arquitectónica, eres el dueño. Escribe y canta porque nadie

puede interferir con tu voz y tu voz nos ayuda a seguir cantando

aún si el hermano se ha ido nadando de la misma playa

donde entierres su cuerpo vuelto con la marea.