María Corina Machado Parisca nació en Caracas, Venezuela en 1967. Es la mayor de cuatro hijas, procreadas por una psicóloga y un destacado empresario del área de construcción y la energía. Estudió en colegios de la élite y se graduó en Ingeniería Industrial, con un posgrado en Finanzas y Negocios en una importante universidad de Venezuela; y completó un programa de formación de líderes en la Universidad de Yale, en Estados Unidos. Está divorciada y tiene tres hijos, los que residen fuera de Venezuela por seguridad. La reconocen  por su carácter fuerte e integridad personal; y el pensador y sicólogo  dominicano Leonte Brea, identifica en ella estas cuatro características: valentía, templanza, persistencia y talento.

Desde niña, ayudaba a menores y adultos desamparados en calles y barrios; de manera personal y a través de fundaciones. A principios de este siglo, fue una de las fundadoras de organizaciones políticas como Súmate y Vente Venezuela, opositoras a Hugo Chávez y Nicolás Maduro, que defienden la libertad económica, los derechos humanos y la democracia. En 2005, fue recibida por el presidente estadounidense George W. Bush para hablar sobre democracia y la  sociedad civil en Venezuela. En 2010, fue elegida como la diputada más votada en la historia de la Asamblea Nacional de Venezuela, donde desafió  al presidente Chávez, voceándole personalmente, que expropiar era robar. Y al poco tiempo le suspendieron su condición de diputada.

Ha desarrollado un importante liderazgo, y el año pasado ganó unas primarias con más del 90% de los votos de la oposición, pero el régimen le impidió presentarse como candidata. Ha sido inhabilitada por defender sus ideas y por pretextos banales, como representar alterna a otro país en la Organización de Estados Americanos y hasta por omitir ingresos insignificantes en su  declaración jurada de patrimonio. Actualmente, el régimen venezolano la persigue tenazmente por lo que vive en la clandestinidad. Dijo temer por su vida y su libertad y proclama que no descansará hasta ser libre.

Recordemos que las elecciones venezolanas fueron parte de los Acuerdos de Catar y Barbados, entre Venezuela y Estados Unidos a finales de 2023, que promueven un clima político, económico y social de respeto a la soberanía, instituciones democráticas y leyes en la nación de Bolívar, y que además influyeron en flexibilizar las sanciones petroleras a Venezuela y propiciar un canje de prisioneros estadounidenses y venezolanos, entre otros acuerdos.

Por su lucha firme ha recibido ataques y amenazas. La han arrestado y golpeado. En 2014 le fracturaron la nariz con una manopla y la hirieron físicamente. Ha proclamado que su causa se basa en pilares éticos y liberales muy sólidos, que defiende un proceso de redención social del país y no un simple torneo electoral. Agradece a Dios por la confianza recibida de tantos venezolanos.

Expertos en el estudio del comportamiento humano, como Sigmund Freud y Daniel Kahneman, han establecido la estrecha relación entre el individuo y su contexto, por lo que al régimen venezolano le recordamos que en República Dominicana la férrea tiranía de Trujillo no resistió la muerte de la heroína dominicana Minerva Mirabal. Y que las mujeres deben ser respetadas, especialmente cuando desarrollan liderazgos en defensa de los más necesitados, sin buscar ventajas personales y arriesgándolo todo. A preservar la integridad física de María Corina, símbolo de la resistencia y la libertad.

Llegue mi solidaridad con los venezolanos que luchan por los derechos humanos y los valores democráticos. ¡Qué viva nuestra patria soberana!.

** Este artículo puede ser escuchado en audio en Spotify en el podcast Diario de una Pandemia por William Galván.