Mayobanex Mueses: El poder de posesión de la tierra en el campo por una minoría trae como consecuencia la estampida a las grandes ciudades de nuestro país de muchos dominicanos. Este cinturón de miseria es el trampolín para la migración a las grandes urbes para conseguir el sueño anhelado. Solo la revisión de la propiedad de la tierra puede amortiguar esta ignominia (pues la auténtica democracia sólo será posible, como lo proclamara Pedro Mir, cuando en este país “sencillamente agreste y despoblado”, en el que “la tierra brota y se derrama y cruje como una vena rota”, los campesinos puedan “cultivar cantando su franja propietaria”).