El Equipo del Blog Novos Alunos publicó el 16 de octubre de 2020: 19 dicas infalíveis de como fazer um trabalho escolar de qualidade. Este artículo está dirigido a los padres brasileños para que ayuden a sus hijos en los trabajos escolares. A continuación, los aspectos relevantes de estos consejos para los padres dominicanos.
- Ayude a sus hijos a mantener la concentración. Procure que estos se concentren al realizar sus trabajos escolares. Para ello, evite que realicen tareas con un ojo en los libros o la computadora y el otro en la televisión u otras distracciones, especialmente utilizando el teléfono celular. Trate de que entiendan que mientras más tiempo pasen sin realizar una tarea, más tiempo les llevará completarla. La clave es animarlos para que las realicen en momentos tranquilos y con la mínima distracción a su alrededor.
- Ayude a sus hijos a elaborar un calendario de actividades. La planificación minuciosa del tiempo ayuda a niños y jóvenes a crear un horario de actividades, incluidas las escolares. Por eso, es fundamental que comprendan que hacer buen uso del tiempo les ayudará a realizar mejores trabajos y podrán dedicar el tiempo disponible a otras actividades. Es fundamental, además, para reunir los materiales necesarios para las tareas y una forma de asegurar que se entregarán a tiempo.
- Establecer un horario de estudio. Disponer de un horario fijo para el trabajo escolar asegura tener el tiempo adecuado para cada tarea. Un aspecto a considerar es establecer los horarios lejos de las distracciones, ya que no tiene sentido utilizar el tiempo entre actividades extracurriculares, si su hijo no puede dedicarse por completo a una tarea específica. Por tanto, hay que tener cuidado de elegir momentos en los que los hijos estén dispuestos y atentos. Si es posible, reservar algunos períodos para acompañarlos de cerca.
- Establecer descansos regulares al estudiar. Muchas personas confunden la productividad en los estudios o en el trabajo, con un rendimiento ininterrumpido. Permanecer mucho tiempo haciendo lo mismo no es la mejor alternativa, ni la que traerá mejores resultados. Para mantener un ritmo adecuado, lo mejor es hacer descansos regulares. Por ejemplo, en un trabajo de 2 horas tomar un descanso de 15 cada 45 minutos, lo cual producirá mejores resultados. Hacer esto es esencial para que el cerebro se mantenga concentrado y enfocado en la tarea. De lo contrario, su hijo puede distraerse con algo que le parece más interesante.
- Presente la importancia de otras referencias. Está bien que las clases se sigan con la mayor atención, tomando los apuntes necesarios para que luego sirvan de referencia. Pero profundizar los conocimientos sobre el tema utilizando otras fuentes como libros, enciclopedias y sitios web confiables es más que recomendable, ya que enriquecen el trabajo escolar y los estudiantes ven con más claridad el objetivo que propone la tarea. Además, la nota puede ser más alta.
- Complemente los estudios con contenidos multimedia. Además de los materiales de apoyo, como las publicaciones y los sitios web apropiados, con la tecnología y la Internet se pueden incorporar contenidos visuales o auditivos interesantes y atractivos para sus hijos. Por ejemplo, antes del trabajo usted puede elegir películas, series, videos y podcasts con información relevante. Todo esto ayuda a contextualizar el tema, aporta nuevas ideas y es una excelente manera de captar el interés e incluso hacer que la tarea sea más divertida.
- Motive a su hijo participando en el proceso de investigación. En vez de dejar la investigación a cargo de su hijo, participe en el proceso para estar cerca de él en el desarrollo del trabajo. Así puede sugerirle películas, series y otros contenidos. También puede hacer encuestas escritas y luego discutirlas entre ambos. Esta interacción hará que la tarea se sienta más como una actividad familiar y el compromiso será mayor, favoreciendo el aprendizaje. También puede ser una forma de presentar otro punto de vista o de plantear temas que aún no se han abordado. Es una forma de hacer más completo y profundo el trabajo escolar, además de mejorar el seguimiento de los estudios.
- Utilice apps para estudiar. La tecnología es una aliada importante del aprendizaje en la escuela y en la casa. Por tanto, las aplicaciones de estudio pueden ayudar a sus hijos en sus investigaciones y contribuir a una mayor concentración en el proceso de búsqueda de conocimientos. El secreto está en conocer cuáles aplicaciones de estudio se ajustan al perfil y al grupo de edad del estudiante. Existen muchas alternativas para que sus hijos puedan tener toda la información siempre a mano y accedan a ella fácilmente. Hay apps destinadas al trabajo en grupo, a la concentración, enfocadas a la parte visual, presentaciones y otras. Las opciones para estudiantes y docentes pueden ser de pago y gratuitas. Estas son una muestra de ambas: App1, app2, app3, app4.
- Advertir sobre las consecuencias del plagio. Es necesario orientar a los estudiantes sobre el plagio, explicándoles las diferencias entre citar y copiar. Es importante que sepan cuáles son las posibles consecuencias e implicaciones de copiar una obra. Explíqueles a sus hijos que el plagio es un delito, no ayuda al aprendizaje y puede ser fácilmente detectado por los docentes.
- Ayude a crear portadas atractivas. La portada de un trabajo escolar debe despertar el interés del lector y presentar la información suficiente. Enséñeles a sus hijos a hacer una portada concisa, con el nombre de la institución y de la asignatura, su nombre y del profesor, su número y/o grado, la fecha de entrega y el título del trabajo.
- Destaque la importancia de la ortografía. Es necesario prestar atención al lenguaje y a la escritura, debido a que los errores gramaticales, de concordancia, ortográficos y tipográficos dificultan la comprensión del texto. Para evitarlos sugiera a sus hijos que revisen la tarea al menos dos veces antes de entregarla. La última mirada hacerla en voz alta, ya que ayuda a identificar los errores más fácilmente.
- Añadir a los trabajos imágenes pertinentes. Imágenes, gráficos y otros elementos visuales enriquecen los trabajos, pero deben ser debidamente explicados. Muestre a sus hijos cómo agregar títulos a cada imagen y a explicar el origen de cada material en la bibliografía.
- Estandarizar un formato para los trabajos. Un trabajo escolar armonioso debe tomar en cuenta la forma estilística del contenido, la fuente utilizada y el uso de las palabras. El texto debería estar estandarizado, es decir, justificar todo a la izquierda, usar Arial, Times New Roman u otras posibilidades. Lo importante es seguir la misma forma. Acordar con los hijos la elaboración de una guía para seguirla en lo adelante, les ahorrará tiempo en futuros trabajos.
- Recurra a la división en secciones. Dividir el trabajo escolar en secciones requiere disciplina, ya que los estudiantes deben conocer el trabajo que realizaron para separarlo en partes. En principio, se puede dividir así: Índice, introducción, desarrollo, conclusión y bibliografía. En la bibliografía Incluir los enlaces a sitios web y blogs investigados, referencias de libros, folletos y cualquier otro material utilizado. Esta es una forma de hacer que todo esté más organizado y crear una secuencia lógica.
- Estimule a sus hijos a buscar otras opiniones. Es importante que los padres y los amigos de los hijos lean el trabajo una vez terminado. Un tercer punto de vista suele ayudar mucho, ya que permite mejorar el contenido. El alumno ha estado tan inmerso en el texto que las incoherencias pasan sin darse cuenta. Y estos son los detalles más fácilmente percibidos por los que leen el texto por primera vez.
- Estimule la comunicación con el profesor. Al realizar un proyecto escolar pueden surgir dudas sobre cuál es el abordaje correcto del tema o qué debe contener. También pueden surgir dudas sobre lo enseñado en el aula sobre conceptos o hechos que deben estar presentes en el trabajo. Por estas y otras razones, es interesante estimular a los hijos a comunicarse con el profesor para obtener una orientación más completa y útil. Este enfoque los ayudará a tener más confianza para continuar y concluirlo con éxito.
- Trabaje la postura para las presentaciones. Algunas obras no terminan con el punto final y deben presentarse en el aula. En este caso, valen la pena algunos consejos para que los hijos sepan cómo comportarse ante el grupo: La postura erguida da más credibilidad a la audiencia. El tono de voz debe ser modulado, ni demasiado alto ni demasiado bajo. Los gestos de las manos y las expresiones corporales deben usarse para enfatizar algunas palabras, pero con la debida moderación, para que no parezcan actitudes artificiales. Ir despacio, dando las recomendaciones en cada presentación.
- Preste atención al nerviosismo de la presentación. En momentos de estrés es normal que el alumno se olvide del contenido y le suden las palmas de las manos. Además, la intimidación por estar frente a un público, aunque sean sus compañeros, y el rigor del profesor pueden provocar ese efecto. Por estas razones, la calma es clave para hacer una buena presentación. Así que trabaje con sus hijos esta situación, pidiéndoles que respiren profundamente y practiquen en la casa antes de la presentación. Recuérdeles que nadie espera que sean oradores profesionales, solo que hablen claramente sobre el tema. ¡La palabra clave es tranquilidad!
19. Estimular la búsqueda de la retroalimentación docente. Una vez completada la tarea, vale la pena animar a sus hijos a contactar el docente para verificar qué se acordó y qué se puede mejorar para el próximo trabajo. Esto es porque, aunque la nota estampada en la portada sea la más alta, es posible recortar algunos puntos para que las próximas tareas sean aún mejores. Este hábito es importante para que aprendan a lidiar con las críticas constructivas y a aceptarlas en procura de mejores resultados. Además, esta práctica es común en el mercado laboral, por lo cual tiene sentido comenzar temprano esta preparación.