Tal vez escribiré para acompañar
tus correcciones de los exámenes. Y sí,
me siento un poco culpable por tener
tiempo para bailar con mi Musa
mientras habrá que ver si el alumno
cumple su tarea, que para nosotros
es otra cosa de más valor,
esta expresión y ofrenda verbal
que la conversación nuestra puede
sustituir sólo más adelante, cuando
encuentres también el tiempo
para ir a la iglesia del escritorio.