Nayib Bukele, presidente de El Salvador, no es un fly al catcher, pues evidentemente sabe lo que hace y por qué lo hace. Tanto así que setenta de cada cien salvadoreños hoy apoyan su reelección. Porque cuando hace cuatro años llegó al poder su país, todo, igual o peor que el Haití de hoy, estaba prácticamente en manos de mil pandillas ladronas y criminales que horrorizaban a toda la población y extendían su poder a las comunidad salvadoreña en Estados Unidos… Pero Bukele, con sentido práctico, no perdió tiempo: “cárcel para todos y ¡fuego al que se resista!” (Y sansiacabó: ¡72 mil presos, centenares de muertos y El Salvador en paz!).