Escribir sobre cine, hace que muchas personas relacionadas nos consulten para algún trabajo monográfico o de otra índole docente o simple curiosidad. Las preguntas y respuestas a continuación son parte de una de esas solicitudes que me han hecho con  relación al cine. Esta tanda de preguntas me llamó a reflexión sobre el rol social de la crítica entre otros aspectos.

Aquí les va.

¿Cómo define usted la crítica cinematográfica?

Es un ensayo. En ese sentido, se convierte en un puente entre la obra cinematográfica (identificándola como tal) y el espectador, destacando valores estéticos y valores éticos de acuerdo al pensamiento crítico de quien escribe.

¿Usted se considera con suficiente nivel para realizar crítica de las películas dominicanas?

No realizo crítica cinematográfica porque es un trabajo muy acucioso y que distrae mucho tiempo y reflexión (las veces que lo hago representa un verdadero sacrificio), además se requiere de un cierto talento y bastante buena memoria, y haber visto mucho cine siempre en el plano contemplativo. Lo que sí realizo es un permanente estudio de todo lo que veo y analizo cada obra desde dos ángulos: el estético y el ético. En ese sentido, me oriento de parámetros inclinándome por el cine de estilo o de autor entre los que domina la obra de Abbas Kiarostami, Jafar Panahi, Victor Erice, y reconozco y estudio la obra de John Ford, Scorsese, Coppola y Alfred Hitchcock, pero sobre todo a Sam Peckinpah y al maestro Sidney Lumet, entre los latinos tengo como obras de culto todo lo que hicieron los maestros Fabian Bielinsky y Tomás Gutiérres Alea y la obra de Fernando Meirrelles. Ahora estoy ampliando hacia cinematografías africana, medio oriente, rusa, japonesa, coreana…

¿Qué criterios se deben tomar en cuenta a la hora de elaborar la crítica de una película?

Que la película en cuestión disponga claramente de valores cinematográficos.

¿Cuáles cree que son los elementos más importantes a destacar en una película a la hora de analizarla?

Los componentes narrativos y su manejo. El guión es la primera condición para que un filme se valorice como tal. Muy pocos directores cinematográficos usan los elementos fundamentales del arte de narrar en cine, algunos lo hacen de manera instintiva pero otros son definitivamente maestros en la exposición y manejo de lo que para muchos es casi un secreto.

¿Qué elementos técnicos debe tomar en cuenta un crítico de cine?

Un crítico cinematográfico ha de disponer de un gran bagaje de conocimientos sobre la parte técnica del cine, pero también debe tener alguna experiencia de cómo se realiza un filme, sobre la actuación, sobre el montaje, sobre las corrientes del pensamiento humano para poder entender el resultado de una obra. Una película no es lo que se dice en su diégesis sino lo que dice en sí la película toda. En mi caso voy cómodo por mi experiencia como actor en teatro y cine, como productor, guionista y director de 339 Amín Abel Hasbún Memoria de un Crimen, como organizador de los festivales del minuto.

¿Qué factores externos usted distingue en primer lugar?

La realidad social. Una obra fílmica se completa cuando es vista por un espectador.

¿A quién va dirigida una crítica?

Las obras de arte son expresiones y resultado del pensamiento y obra creativa de la humanidad. En el caso de los filmes es muy determinante que el creador o creadores mantengan su línea expositiva dirigida a un determinado grupo social. Una crítica debe tomar en cuenta que no es algo inmutable o que niegue cualquier debate. La crítica auténtica es como un ensayo que no tiene ni persigue público.

¿Qué lenguaje se debe utilizar?

Coloquial, procurando citar conceptos y ejemplos debidamente documentados y en un nivel didáctico.

¿Cree que el público dominicano toma en cuenta la crítica de cine que se realiza en los medios de la República Dominicana?

El gran público se lleva más del ‘boca a boca’ o del rumor. Aunque es muy sensible a la ‘crítica’ o la cantidad de gente que vote a favor por un filme.

¿Cree que la crítica que se realiza en los medios de comunicación afecta las decisiones del público a la hora de asistir a la proyección de una cinta cinematográfica?

En el caso de filmes extranjeros no, pero sí en el caso de los filmes criollos; El caso de los cinéfilos, estos se llevan más de críticas foráneas que buscan en páginas de cine por Internet.

A su entender, ¿a quienes considera como los principales críticos del país?

Siempre recordaré al fenecido Humberto Frías como mi paradigma. Nunca dejo de tomar en cuenta lo que escribe o comenta cualquier persona en medios dominicanos.

¿Considera que la crítica emitida responde a parámetros específicos? O ¿simplemente se dice lo que se piensa?

Es lógico que escriban según lo que piensan, pero en general la crítica de dominicanos no se sujeta a parámetros cinematográficos en el sentido de que no se analiza una película según sus valores cinematográficos ligados a estilos o formatos específicos, que es como yo hago mis comentarios bastante prejuiciados. Una buena crítica es la que explicita los valores ocultos e interpreta y describe los enlaces con el macro contexto cultural. Como especialista, se debe tener la suficiente madurez intelectual para no desvirtuar con lecturas forzadas y distorsiones –muy común en los neófitos que se vanaglorian de críticos en esta media isla–. La diferencia entre uno y otro es que el neófito como el espectador “ve” la película, mientras el crítico la “lee”.

¿A qué llama una película excelente, buena, regular, mala, nefasta?

Yo me fijo mucho en un filme a partir de la manera en cómo se maneja el lenguaje del cine.  Lo que es excelente para mí no necesariamente lo sea para otros y viceversa. Una película es buena o excelente para mí en la medida en que el guión esté bien escrito en términos cinematográficos, que la dirección de cámara sea ‘invisible’, que las actuaciones no sean clichés o al menos clichés moderados o que le luzcan al actor o la actriz, que la música ‘no se oiga’ y que apenas marque intenciones de la historia y de los personajes, me gusta mucho el uso de la música diegética, que la dirección no sea un cliché y que sea acertada a las circunstancias en que se desarrolla la historia, por ejemplo, una dirección  moderna en una historia de época (algunas décadas atrás) puede ser buena, pero no responde a la estética o narrativa del momento en que se llevó a efecto la historia que se cuenta. Es como querer contar la historia con una estética de videoclip. En todo caso una excelente o buena película es aquella que logra impactar, crear identificación y provocar empatía.

¿Alguna película de las dominicanas que se han hecho se puede catalogar de buenas?

Alguna que otra tiene un guión aceptable y me ha impresionado –principalmente aquellos cortometrajes de los festivales del minuto que hago– porque maneje eso que muchos llaman “secretos” y que es técnica o intuición. A veces uno realiza un buen manejo de la narrativa cinematográfica en un cortometraje o un largometraje con intuición, y con los años después de mucho estudio, análisis, debate, relecturas, descubre esos llamados “secretos”, pero que están ahí a la vista de todos y no los percibimos como tal. Es la pequeña diferencia entre ver y mirar. Del concierto de películas dominicanas, me inclino por apreciar y valorar por encima a los cortometrajes del festival del minuto que hago desde el 2004 cuando empecé con el tema Juan Bosch, pasando por anticorrupción, resistencia, agua, violencia machista, Trata, Sanchez, Duarte, Alimentación, migración dominicana entre otros y ahora mismo con el de José Francisco Peña Gómez.