VII

La he visto figurar en el sosiego

Muerta sí y frugal como hace tanto

Como la bestia ardiente celebra

La ubérrima extinción de los sollozos

Ingrávida y posesa

En las ondas danzantes

Un soplo más antiguo

Me supe desde entonces

Cayena azul   ojo boreal

Manos y pelvis

Más puro visceral

Danza danza   labio para el himno

Levantando chopos a latidos

Harapos    besos

Dedos  sombras  mutiluz

Cuando no Penélope

 

 

 

De lo puro visceral

A torsiones más altas queda puesto

Aquel líquido danza

Como himno en el labio de la hybris

Licúo el ojo  limpio el miembro

Deshurto su círculo solar

Pues ningún recuerdo

Tremula si en tu vórtice

Una excitación abraza y muere

Vacío el tiempo corre

Por témperas de sábanas

De tu río en otros ríos   fluye y desgarba

Renace en el mismo centro

Ausente como un niño

En cristal el ojo envuelto

Girando el viento de otra sangre

Los ángeles oscuros transfiguran

Labios como sombras    lunas como llamas

La danzante gorjea otro sunya

Cojea de puntas en su visillo intestinal

Airada escupe   esconde la chapa desvaída

Y en su sombra el ojo tiembla

Como eléctrico el tatuaje

Flota en agua misteriosa hacia el poema

Hacia la espía del espejo

El aliento postrer del verdugo

Y la desesperanza de la hoguera

Bajísimo el vestido tras las manos de otras manos

–los ojos como derrelictos–

transparente    tibio    redondo

desretorno y soy yo mismo que se erige calcinado

(h)ec(h)os vómitos los ojos

Color de vida                          Agua ciega de mi piel

Tu cuerpo espanto                   Manos y pelvis

Tu ser loco                              Fuente de ti

Danza danza                            Más pura que el dolor

Color jueves                            Líquido mío

Vísceras y labios                      Púrpura en mis manos

Me veo correr en todas partes

Me vuelvo en todas partes

Me deslío y soy yo mismo

(que se vuelve calcinado)

Mi corazón llovizna sus instrumentos locos

¿Qué sucede si el ser se aleja de su tacto?

¿Si el pensamiento atrae hacia su sombra y agoniza?

¿En otros círculos encarna   vacío se inmola?

Entre lámparas y piernas   huye o regresa

Y roza el cuerpo   desdibuja el labio

Dentro de sí el ser vacía

Todo su ser

Se aleja de su centro hacia otro hueco

El Uno transfigurado como onírico

Holístico de horror

Un cáliz arde como potro alado

Y hacia esa puerta otra sombra me refleja

Y hacia esa sombra   congelados   otros lloros

Liberan

¿Qué ruinas empero huellan?

Circe vibrante  y cíngulo sonoro

¿Qué otros ecos desmueven en el alba

Un estremecimiento un dolor un quejido

Tantálico gótico del semen?

El ojo derramado en hondos círculos

Desretorna

Y el raudo potro de la perfección

Es mi dolor y mi otra muerte

Porque diverso y uno es el polvo

Turbio y vacío   –los párpados sangrantes–

La Incognoscible bajo el árbol llora

Desanda limpio el círculo

Deja su sombra que lo deja solo

Y entre corredores dibuja un alto lirio

Testigo mudo de las sombras

Tibio espectro

Sátiro   satán   transformador celeste

Atraviesa o atardece

Esbelto transfigura y limpia el aura

Trócase fantasma   arrástrase a otro hechizo

Con hondas tibias piernas y vacías

En tantísimo vuelo

Su nombre por Nadie escrito

En lo alto de la luz

Sólo la danza

Va corrigiendo ruinas   cae redonda

Gira como el grito en otra sangre

Vertiginosa espía   su eje sordo

Onírico y transpuesto

Inexistente en todo el ojo

Sólo la danza

-–oh placer alado

el intersticio de la desventura

de mitad horizontal para levitar la tempestad–

Sólo la danza

Como lluvia púber sinfoniza arterias

Fantásticas las noches que destruye

Y frena círculos al amor

De ojos del somnífero

El plomo y la garganta

Vidas comprime

Veneno arriba se desdobla

Oh amada

¿Por qué beber entonces en lo cierto del vaso

Lo que aún no conoces

Si en cinco tréboles de carne

El vacío me deja

Limpia   tersa

Tu boca envenenada?