1.- La dinámica de la vida diaria está colocando a muchos dominicanos y dominicanas, a comportarse con la palabra a flor de labios de “no me importa”; “poco o nada me concierne”; “eso no me incumbe, me da lo mismo”.

2.- La lucha lleva a los pueblos a las conquistas necesarias para su bienestar material y cultural. Esto es lo que enseña la historia práctica.

3.- Si las masas populares no están dinamizadas, no ejecutan las acciones encaminadas a los objetivos perseguidos para sus legítimas aspiraciones.

4.- A los oprimidos hay que motivarlos para que se pongan en tensión, y así producir hechos que lleguen a acarrear consecuencias de relevancia.

5.- El desánimo, el apagamiento, el tedio es vencido impulsando interés, elevando ánimo allí donde hay apatía. Se combate la flojedad mediante el entusiasmo, y todo lo que significa disposición a obrar.

6.- Si en una determinada etapa de la brega política las fuerzas con capacidad y condiciones de generar renovación social se desmotivan, entonces lo que procede es estimularlas, sembrarles firmes convicciones, hacer que conozcan hechos históricos que las incentiven.

7.- Conviene dar a conocer fechas que marcan puntos de referencia en la política nacional dominicana. Estar bien informado favorece saber la realidad de las cosas que ocurren o han sucedido en un pasado reciente.

8.- Tomando la idea anterior para que sirva como hilo conductor, me permito narrar dos eventos en los cuales participé y ocurrieron tal como lo expongo a continuación.

9.- Después de la desaparición física de Rafael Leónidas Trujillo Molina, en el  país gobernó el Consejo de Estado que,  supuestamente, en forma imparcial organizaría  el proceso electoral a celebrarse el 20 de diciembre de 1962. Para esta época yo formaba parte, en Santiago,  de la dirección del Partido Socialista Popular (PSP), al cual había ingresado en febrero de 1962, luego de un encuentro con los hermanos Juan y Félix Ducoudray, a quienes conocí por medio del  periodista Miguel Ángel Velásquez Mainardi.

10.- Con la consigna de “12 de julio, yanquis no”, en Santiago de los Caballeros, el PSP organizó un mitin en la glorieta del Parque Duarte. Allí pronuncié un discurso para desempolvar la fecha en la cual los norteamericanos habían desocupado el país en 1924, luego de la intervención de 1916. [i]

11.- En la misma ciudad de Santiago, el sábado 14 de julio de 1962, organizaciones políticas y estudiantiles realizaron una manifestación en el Parque Duarte. Al finalizar la misma, hicimos movilizaciones por calles de la ciudad, principalmente por la calle Del Sol. Varios fuimos apresados y encarcelados en el cuartel de la Policía Nacional. El doctor Rafael Valera Benítez, Fiscal de Jurisdicción Nacional, quien estaba en la ciudad en gestiones de investigación por el asesinato de las hermanas Mirabal, dispuso la libertad de los que habíamos sido detenidos.

12.- Hay que confiar y fijarse la idea de que en nuestro país, no todo está perdido, y, por tanto, hay que continuar  batallando, trillando el camino de lo que será el luminoso porvenir del pueblo dominicano.

13.- A la juventud de hoy es bueno recordarle hechos que, en su conjunto, forman la historia dominicana. Hay testimonios que pueden enriquecer el conocimiento.

14.- Por muy pequeño que sea un acto sirve para debidamente narrado tener presente un  hecho ocurrido hace varias décadas.

15.- Ahora no, pero el día llegará cuando en las escuelas a los estudiantes del país se les hablará del contenido histórico del 12 de julio de cada año, porque esta fecha forma parte de la historia  política y social de la nación dominicana.

Fuente

[i] La Información, 16 de julio de 1962.