"Deben estar tras las rejas": el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, pidió el miércoles cárcel para la líder opositora María Corina Machado y su candidato Edmundo González Urrutia, reconocido por Estados Unidos como vencedor en las presidenciales del domingo, en medio de denuncias de fraude.

Machado, que sostiene que González Urrutia ganó con amplia mayoría, respondió a la advertencia de Maduro con un llamado a la movilización.

"Le ofrecimos al régimen que aceptara democráticamente su derrota y avanzar en una negociación para asegurar una transición pacífica; sin embargo, han optado por la ruta de la represión, la violencia y la mentira", escribió Machado en X. "Ahora nos corresponde a TODOS hacer valer la verdad que TODOS conocemos. Vamos a movilizarnos LO LOGRAREMOS”, añadió sin precisar detalles.

Tres días después de la elección, Maduro prometió este miércoles presentar todas las actas de las cuestionadas votaciones, al acudir al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) para pedirle que se pronuncie sobre el asunto.

"He dicho, como jefe político, hijo del comandante (Hugo) Chávez, que el Gran Polo Patriótico y el Partido Socialista Unido de Venezuela están listos para presentar el 100% de las actas", dijo el gobernante a periodistas en la sede del TSJ. .

El Consejo Nacional Electoral (CNE) lo proclamó como presidente electo para un tercer mandato de seis años con 51% de los votos frente a González Urrutia, con 44%. La oposición sostiene que posee copia de más del 80% de las actas y que su aspirante concentró el 67% de los sufragios.

"Está claro que Edmundo González Urrutia derrotó a Nicolás Maduro por millones de votos (…). El CNE de Maduro necesita tiempo para preparar resultados falsificados", dijo el jefe de la diplomacia estadounidense para el Hemisferio Occidental, Brian Nichols.

La autoridad electoral no ha publicado resultados en su web, alegando que fue blanco de un "jaqueo masivo".

"Manos llenas de sangre"

Tras la proclamación de Maduro, las protestas se estallaron el lunes en Caracas y otras ciudades, aunque se habían ido disipando.

Mientras Machado denunció una "escalada cruel y represiva" y asegura que la cifra de fallecidos en manifestaciones se eleva a 16, Maduro responsabilizó a González Urrutia ya ella por la violencia y dijo que "nunca jamás" llegarán al poder.

"Ustedes tienen las manos manchadas en sangre", dijo el mandatario. "Deben estar tras las rejas", agregó.

Por su parte, el secretario de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, adelantó este miércoles que va a presentar cargos ante la Corte Penal Internacional de "imputación y orden de captura" contra Maduro por el "baño de sangre" en Venezuela.

"Maduro prometió un baño de sangre (…) y lo está haciendo", escribió Almagro en X.

Horas antes, el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, había declarado que "las amenazas" contra Machado y González Urrutia "son inaceptables".

Según el fiscal general, Tarek William Saab, en las protestas también murió un militar, 77 funcionarios han resultado heridos y más de mil personas han sido detenidas.

Un grupo de organizaciones internacionales que incluye a Amnistía Internacional y Freedom House condenó "el uso desproporcionado de la fuerza" y exigió "respeto y garantía del derecho a la libertad de expresión, reunión y protesta pacífica".

Presión internacional

La presión para un recuento de votos aumenta.

"Nuestra paciencia, y la de la comunidad internacional, se está agotando a la espera de que las autoridades electorales venezolanas digan la verdad", había dicho el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, antes de las declaraciones de Nicolás.

"Entonces yo puedo decir 'perdí la paciencia con ustedes'", replicó Maduro.

El Centro Carter, invitado por el CNE para observar los comicios, señaló que las presidenciales no se adecuaron a "parámetros y estándares internacionales" y "no pueden ser consideradas como democráticas".

Cientos de seguidores de Maduro se manifestaron este miércoles en el centro de Caracas. "Todo lo que está diciendo la oposición es para desprestigiar. Ellos están con vandalismo, haciendo cosas malas. Acepten su derrota", dijo en la marcha la activista Yuli Jiménez, de 44 años.

Desde que comenzaron las protestas por un recuento de votos, Caracas se ha mantenido semiparalizada, con comercios cerrados y escaso transporte público.

"Acuerdo de convivencia"

El Consejo Permanente de la OEA rechazó una resolución para exigir transparencia sobre el proceso electoral venezolano, al no alcanzar la mayoría requerida.

La cancillería de la vecina Colombia, país que se abstuvo en la sesión de la OEA, anunció en un comunicado "contactos permanentes con los gobiernos de Brasil y México para crear las condiciones necesarias" en busca de "un acuerdo de convivencia" en Venezuela.

Brasil también prefirió abstenerse y México rechazó participar.

El documento subraya además que "se han sostenido conversaciones constantes" con el gobierno de Maduro y sectores opositores.

El presidente colombiano, Gustavo Petro, uno de los aliados regionales de Maduro, pidió en X un "escrutinio transparente" con "veeduría de todas las fuerzas políticas" y "veeduría internacional".

"El presidente Petro (es) un hombre honorable, serio, lo escucho mucho, estoy en diálogo con él", respondió Maduro. (Nina NEGRON)