El senador Davi Alcolumbre, cuya candidatura era respaldada tanto por los partidos que apoyan al presidente Luiz Inácio Lula da Silva como por los alineados con el ultraderechista Jair Bolsonaro, fue elegido este sábado como presidente del Senado brasileño para los dos próximos años.

Alcolumbre, que también asumió la presidencia del Congreso bicameral de Brasil a partir de este mismo sábado, se comprometió en su campaña a apoyar las iniciativas de interés del Gobierno en los dos últimos años de gestión de Lula, pero también algunas de interés de la oposición bolsonarista.
Senador Davi Alcolumbre en el Congreso. Brasilia 1 de febrero de 2025. (Photo by EVARISTO SA / AFP)

El senador por el pequeño y poco poblado estado de Amapá, en la Amazonía brasileña, y miembro del partido centrista Uniao Brasil, consiguió reunir el respaldo de nueve formaciones de diferentes ideologías, incluyendo las de izquierda que apoyan a Lula y las opositoras de derecha lideradas por Bolsonaro.

Alcolumbre, que ya presidió el Senado en el período entre 2019 y 2020, en los dos primeros años de Gobierno de Bolsonaro, a cuya gestión apoyó decisivamente, obtuvo 73 votos de entre los 81 senadores brasileños en una votación realizada este sábado, cuando el Congreso reinició actividades tras un mes de receso parlamentario.

El nuevo presidente del Senado se impuso por amplia ventaja a los senadores Eduardo Girão y Marcos Pontes, de los derechistas partidos Novo y Partido Liberal, que disputaron la elección sin el apoyo de sus formaciones. Girão y Pontes obtuvieron cuatro votos cada uno.

Otros dos senadores que también se habían postulado al cargo, Soraya Thronicke y Marcos do Val, ambos integrantes de la formación derechista Podemos, retiraron su candidatura poco antes de la votación tras constatar que Alcolumbre contaba con el apoyo de casi todos sus pares.

El nuevo presidente del Senado también contaba con el apoyo incondicional del saliente, Rodrigo Pacheco, que comandó el Congreso entre 2021 y 2024, fue un importante aliado de Lula en el Parlamento y un decisivo defensor de la democracia tras el intento de golpe de Estado del 8 de enero de 2023.

Alcolumbre no solo es uno de los políticos más influyentes del Congreso sino también, a sus 47 años, uno de los más jóvenes en el comando del Legislativo.

Además de mantener la influencia en el Senado en los últimos cuatro años gracias a que Pachecho era su sucesor y ahijado político, Alcolumbre articuló personalmente la inclusión de dos miembros de Uniao Brasil en el gabinete de Lula.

Durante su anterior mandato el Congreso amplió su poder sobre el presupuesto del Gobierno mediante la creación de enmiendas que dan a cada parlamentario derecho a destinar recursos a sus bastiones electorales, práctica que fue limitada en los últimos meses por la Corte Suprema.

En su campaña, por lo mismo, se comprometió a defender la independencia del Legislativo frente al Ejecutivo y a recuperar el amplio poder que tenía el Congreso sobre el presupuesto.

Pese a que ha dejado claro que defenderá las iniciativas de interés del Gobierno de Lula y las incluirá rápidamente en la pauta de votaciones, Alcolumbre también se comprometió con proyectos defendidos por la oposición derechista, incluso con la instalación de una comisión para estudiar una posible amnistía a los bolsonaristas condenados por el intento de golpe en 2023.

Para garantizar el respaldo de la derecha también se comprometió a ofrecerle la presidencia de importantes comisiones a miembros de la oposición, lo que permitirá que el senador Flávio Bolsonaro, hijo del expresidente, asuma el comando de la Comisión de Seguridad Nacional.

La formación de Bolsonaro, el Partido Liberal, también tendrá derecho a la primera vicepresidencia del Senado, lo que aumenta significativamente el poder de la oposición en la mesa directiva del Congreso.