El gobierno de Ucrania acusa a su par de Rusia de cometer genocidio contra la ciudadanía ucraniana. El gobierno de Rusia lo niega.

Fuera de estos dos gobiernos enfrentados, dan crédito a la versión del genocidio el presidente de Estados Unidos, Joe Biden; el primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, y algunos de sus aliados.

Sin embargo, tres de los más importantes aliados de EEUU, Alemania, Francia e Italia, no dan crédito a la versión de que Rusia comete genocidio en Ucrania.

Asimismo, dos figuras polémicas difieren sobre esta afirmación. El expresidente y de nuevo aspirante presidencial estadounidense Donald Trump, quien había mostrado simpatías y admiración por Vladímir Putin, ahora suscribe la acusación del presidente Joe Biden contra Rusia, de supuesto genocidio en Ucrania. Pero la aspirante presidencial Marine Le Pen, de Francia, no cree que exista tal cosa como un genocidio en las acciones de guerra de Rusia en Ucrania.

Macron difieren de Biden sobre el uso de la palabra "genocidio"

Desde París, capital de Francia, el presidente Emmanuel Macron volvió a desmarcarse de su homólogo estadounidense, Joe Biden, y consideró que la palabra "genocidio" para definir la ofensiva rusa en Ucrania no debe usarse a nivel político.

"Los juristas son quienes deben calificarlo como genocidio, no los políticos. Si es un genocidio, los países que lo consideren como tal deben intervenir, de acuerdo a las convenciones internacionales. ¿Queremos eso? No lo creo", dijo en la emisora pública France Bleu.

Macron advirtió de que no ayuda a Ucrania "entrar en una escalada verbal sin asumir todas las consecuencias", y subrayó que París ha enviado a magistrados y gendarmes para ayudar a ese país a documentar los crímenes de guerra y poder lanzar los procesos que sean pertinentes.

Biden usó el martes por primera vez la palabra "genocidio" para describir la guerra en Ucrania. Lo hizo cuando estaba hablando de los esfuerzos de su Gobierno para frenar el aumento de los precios de la gasolina como resultado de la invasión lanzada por el presidente ruso, Vladímir Putin, en Ucrania.

"El presupuesto de sus familias, su capacidad para llenar el tanque, nada de eso debería depender de si un dictador declara la guerra y comete un genocidio en el otro lado del mundo", sostuvo en referencia a Putin y a Ucrania.

El pasado 27 de marzo, Macron también se distanció del jefe de Estado estadounidense después de que este calificara de "carnicero" al líder ruso.

"Yo no utilizaría esas palabras", indicó entonces en la cadena France 3, donde el también candidato a la reelección en los comicios del próximo 24 de abril afirmó que "hay que hacer todo lo posible para que la situación no derrape".

Le Pen rechaza que exista un genocidio en Ucrania

Por su lado, la líder de la extrema derecha francesa, Marine Le Pen, coincide con su contrincante en la segunda vuelta de las presidenciales, el actual jefe del Estado Emmanuel Macron, en no querer utilizar el término de genocidio para calificar lo ocurrido hasta ahora en la guerra de Ucrania.

En una entrevista al canal de televisión France 2, Le Pen señaló que a su juicio, las matanzas de civiles que se han constatado allí son "crímenes de guerra" para los que ha reclamado desde el inicio del conflicto investigaciones que permitan determinar quienes son "los responsables de esos horrores".

Insistió en que "el término crimen de guerra está adaptado" a lo que ocurre allí y no el de genocidio, que tiene "una definición extremadamente precisa que no se puede dar en este momento del conflicto".

Italia afirma que no puede verificar si existe un genocidio en Ucrania

En Roma, el Ministro de Exteriores italiano, Luigi di Maio, afirmó que "Italia no tiene los elementos para verificar si se está produciendo un genocidio en Ucrania", aunque añadió que "las atrocidades" cometidas por el Ejercito ruso "están bajo nuestros ojos, como la muerte de niños y la muerte de civiles".

Así respondió el jefe de la diplomacia italiana a la pregunta sobre si se está perpetrando un genocidio en Ucrania como dijo el presidente estadounidense, Joe Biden, una afirmación no compartida, por ejemplo, por el jefe de Estado francés, Emmanuel Macron.

En una entrevista en la emisora pública Radio Rai1, Di Maio agregó que "a través de la Unión Europea proporcionaremos todas las pruebas a nuestro alcance para verificar si ha habido crímenes de guerra en Ucrania, verificar a todos los responsables".

"Lo que hemos visto en Bucha y Krematorsk y que lamentablemente veremos en otros lugares es atroz, aterrador y tendremos que llevar a los responsables ante la justicia internacional”, agregó el titular de Exteriores.

En materia de diálogo diplomático a favor de la paz, el ministro insistió en la necesidad de continuar con los corredores humanitarios aunque constató que "Putin no expresa intenciones de paz y por ello es necesario mantener el proceso de sanciones contra Rusia".

A la pregunta sobre la posibilidad de la ampliación de la OTAN a los países bálticos, Di Maio explicó que "otros países que están en la frontera con Rusia o en el este ven lo que está pasando en Ucrania como una amenaza para ellos mismos. Países como Finlandia y Suecia están muy cerca de las tropas rusas y ahora hay ciudadanos que le piden a su gobierno que se una a la OTAN porque la OTAN es una alianza defensiva”.

Sin embargo, el ministro italiano explicó que ahora es el momento de pedir que se detenga la guerra. "Necesitamos reiniciar el proceso de diálogo entre Ucrania y Rusia", dijo.