El fraude recién descubierto con las tarjetas Supérate, del programa de política social del gobierno, es un duro golpe a los esfuerzos oficiales por maximizar los fondos públicos para compensar a los más desfavorecidos.
Es un fraude por más de 300 millones de pesos, hasta ahora. Podría ser por unos cientos de millones más, si observamos la destreza con que los delincuentes se servían de los fondos destinados a los sectores pobres. La inclusión de colmados en los barrios, el uso de dispositivos electrónicos, y el conocimiento interno del programa, además del acceso a las bases de datos, revelan una destreza criminal que debe ser investigada.
El presidente Luis Abinader luce enfadado con este robo, y tiene razón en estarlo. La administración del presidente Abinader ha destinado miles de millones de pesos para tratar de suplir las necesidades de los más pobres durante toda la pandemia de Covid-19, y ahora con la inflación disparada sigue disponiendo de otros miles de millones de pesos para políticas públicas de compensación.
El caso luce con gravedad desconcertante porque se trata del robo directo de los fondos colocados en las tarjetas de los mas pobres. Personas que no tienen ni siquiera oportunidad de ser atendidos en sus denuncias. O que como se trata de la recepción de dinero público, dinero del presupuesto, lo necesitan pero no tienen la oportunidad de salir a reclamarlo. Por esa razón el presidente Abinader ha hablado de prisión sin contemplación para los que resulten responsables de este robo sistemático durante un período de tiempo que aún se desconoce.
Es muy probable que la misma banda, o una banda anterior con conexiones en la nueva administración, haya sido responsable de desfalcos que no se conocen con la tarjeta antecesora de Supérate. Y como no hubo seguimiento, investigación, y nadie hizo ninguna denuncia, que no se supiera que de los fondos destinados a las políticas sociales hubo desfalco en la pasa gestión.
Corresponde una investigación detallada y completa. El Gabinete de Política Social debe colaborar y ofrecer todos los datos en su poder al Ministerio Público y a las instituciones que puedan colaborar para encontrar a todos los culpables de este descarado asalto a los fondos destinados a los más pobres del país.
El Gabinete de Política Social del gobierno aumentó los montos de los programas sociales para los más pobres, y esta semana incorporó 300 mil beneficiarios más de la tarjeta Supérate!. Se ha dicho que estos beneficiarios han sido evaluados por el Sistema Único de Beneficiarios (SIUBEN), y que el sistema financiero para cuanto sea posible para asegurar los fondos y los datos y que lleguen a los que realmente necesitan estos recursos.