Wall Street abrió este miércoles en rojo y el Dow Jones de Industriales, su principal indicador, bajaba un 0,89 %, en la primera jornada bursátil tras las elecciones de medio mandato en Estados Unidos, que se celebraron ayer y cuyos resultados aún no están claros.
Diez minutos después del inicio de las operaciones, el Dow Jones restaba 295,86 puntos, hasta los 32.864,97, mientras que el selectivo S&P 500 bajaba 0,87 % o 33,39 unidades, hasta 3.794,72.
El índice compuesto del mercado Nasdaq, donde cotizan las principales tecnológicas, era el más afectado con una bajada de un 1 % o 106 unidades, hasta 10.509,94.
El miércoles por la mañana aún no se habían contado todos los votos de las elecciones de medio mandato y algunas carreras podrían tardar días en ser resueltas.
No obstante, las proyecciones de los medios de EE.UU. apunta que los republicanos son los favoritos para hacerse con la mayoría en la Cámara de Representantes, mientras que los demócratas llevan una ligera ventaja en el Senado.
The Wall Street Journal apunta hoy que "históricamente" estas elecciones de medio mandato "tienden a beneficiar a las acciones".
En cada uno de los 19 ciclos de medio mandato desde la Segunda Guerra Mundial, el S&P 500 ha subido un año después, según un análisis de Deutsche Bank.
Mañana se darán a conocer los datos de inflación para octubre.
Antes de la apertura de la bolsa, el propio Mark Zuckerberg, de la tecnológica estadounidense Meta, propietaria de Facebook, WhatsApp, Instagram y Messenger, anunció que despedirá a unos 11.000 trabajadores, el 13 %de su plantilla, y tras la apertura de Wall Street las acciones de la compañía subían un 6,61 %.
Todos los sectores empezaban la mañana con pérdidas, siendo el más afectado el energético que perdía más de un 2 %.
Entre las 30 empresas cotizadas del Dow Jones, destacaba la caída de un 10,58 % de Walt Disney, que ayer presentó sus resultados.
En otros mercados, el petróleo de Texas bajaba hasta 87,37 dólares el barril, el rendimiento del bono del Tesoro estadounidense a 10 años ascendía hasta el 4,159 %, el oro bajaba hasta 1.713,10 dólares la onza y el dólar ganaba terreno frente al euro, con un cambio de 1,0019.