De acuerdo con el Centro Regional de Estrategias Económicas Sostenibles (CREES), en el país el costo de los servicios de telecomunicaciones es considerablemente más alto debido a la carga impositiva que enfrentan los usuarios.
Sostiene que cada vez que una persona realiza una recarga de RD$ 100 en servicios de telecomunicaciones, no todo ese monto se destina realmente al consumo en llamadas, datos o mensajes, solamente RD$ 70 son destinados a servicios de telecomunicaciones.
El 30 % restante se destina al pago de impuestos, lo que reduce el valor efectivo que los usuarios pueden aprovechar, de acuerdo al análisis.
De esos RD$ 100, alrededor de RD$ 30 se dedican al pago de distintos impuestos. Esto incluye un 18 % correspondiente al Impuesto sobre la Transferencia de Bienes Industrializados y Servicios (Itbis), un 10% del Impuesto Selectivo al Consumo (ISC) que se aplica específicamente a los servicios de telecomunicaciones, y un 2 % adicional para la Contribución al Desarrollo de las Telecomunicaciones (CDT).
"Estos impuestos combinados dejan al usuario con aproximadamente RD$ 70 de saldo real para utilizar, lo que encarece el acceso a servicios básicos de comunicación", indica el Centro.
Explica que el impacto de estos impuestos no solo se refleja en los costos que pagan los consumidores, sino la inclusión digital del país. Sostiene que para muchas familias de bajos ingresos, el acceso a servicios de telecomunicaciones no es simplemente un lujo, sino una necesidad, especialmente en un contexto donde la conectividad es esencial para acceder a la educación en línea, el trabajo remoto y otros servicios digitales.
"Sin embargo, debido al alto costo de los servicios formales generado por la carga fiscal, muchas de estas familias no logran contratar planes de internet o telefonía de manera regular, lo que las excluye de importantes oportunidades de desarrollo", sostiene
Indica que el encarecimiento de los servicios fomenta prácticas informales, como la reventa de servicios de internet o el uso compartido de líneas telefónicas, las cuales no garantizan la misma calidad de servicio ni la estabilidad que ofrecen los proveedores formales.
El CREES sostiene, además, que esta carga impositiva también afecta a las empresas, que deben contratar estos servicios de forma recurrente. "Impuestos que agregan un peso sobre la rentabilidad de las empresas, que hoy en día utilizan las telecomunicaciones como un insumo más para sus operaciones".
Esto genera un aumento en los costos de vivir y de hacer negocios en República Dominicana, concluye el CREES.