La carga impositiva, el auge de empresas informales, la energía eléctrica, el bajo nivel educativo y el complejo procedimiento para el pago de impuestos, son los cinco obstáculos que le impiden a los emprendedores tener un mejor desarrollo sus empresas en República Dominicana.
El Centro Regional de Estrategias Económicas Sostenibles (CREES), hace este análisis basado en el reciente estudio del Banco Mundial que muestra una serie de factores identificados por los emprendedores locales como dificultades para desarrollar sus empresas.
La primera traba, señala CREES está relacionada con el sistema tributario, y 25 % de los encuestados respondió que esta representa una carga pesada para los negocios; mientras que 6.9 %) dice que sus procedimientos son complejos.
Dado lo anterior, no es de extrañar que en el país la informalidad sea elevada. El sistema tributario, entre otros factores regulatorios, crea un incentivo a permanecer al margen de las legislaciones.
Como consecuencia, el segundo obstáculo identificado por los encuestados es la competencia de empresas informales que representa el 14.7 %.
Los otros problemas, se relacionan a dos sectores claves de control público: electricidad 11.2 % y formación educativa 9.7 %.
En ambos sectores priman las decisiones políticas por encima de las relacionadas con la eficiencia; o con la productividad, un elemento que se trata de promover por medio del estudio.
Ambos sectores tienen en común que diferentes administraciones no han realizado las reformas necesarias para proporcionar educación pública de mejor calidad o suministrar energía constante sin recurrir a los subsidios para cubrir las pérdidas de las distribuidoras.
Una reflexión importante al observar estos cinco obstáculos, destaca CREES se relacionan con el problema fiscal de República Dominicana. El gasto en educación, dado sus resultados, ha demostrado ser excesivo. Una reforma basada en elementos de fundamentos podría arrojar mejores resultados con menos recursos. El sector energético le costó a los contribuyentes dominicanos US$ 1,600 millones en 2022. Por medio de la carga tributaria a los ciudadanos, se trata de subsanar estos dos problemas. Elevar la tributación para financiar estas falencias públicas.
Del estudio, en consecuencia, se desprende que, si se desea alcanzar un nivel mayor de productividad, y competitividad, en República Dominicana es preciso empezar con las reformas estructurales adecuadas.