“La bombera”, y no “la bombero”, es la forma adecuada para referirse a una mujer que tiene por oficio extinguir incendios y prestar ayuda en otros siniestros, explica Fundéu Guzmán Ariza.

En las noticias sobre la gran explosión que se produjo el 14 de agosto en la provincia de San Cristóbal, República Dominicana, en los medios de comunicación se observa el uso inadecuado del masculino en frases como “¿Quién es María Valera?, la bombero de 19 años que arriesgó su vida en la tragedia de San Cristóbal” o “La Universidad Católica de Santo Domingo le otorgó una beca estudiantil a la joven bombero del Distrito Nacional”.

María Valera.

Según consta en el “Diccionario de la lengua española”, el sustantivo “bombero” presenta la forma femenina “bombera”, tanto en sus significados más generales como en la acepción de ‘empleado de un surtidor de gasolina’ usual en el español de la República Dominicana, Colombia, Nicaragua y Venezuela.

Además, el “Diccionario panhispánico de dudas” especifica que el femenino de los sustantivos masculinos acabados en “-o” que designan profesiones, cargos, títulos o actividades se forma normalmente sustituyendo esta vocal por una “-a”, como en “médico”/“médica”, “ministro”/“ministra”, “ginecólogo”/“ginecóloga, “bombero”/“bombera”. Por tanto, se debe evitar emplear el masculino para referirse a una mujer.

Siendo así, en los ejemplos citados lo más apropiado habría sido escribir “¿Quién es María Valera, la bombera de 19 años que arriesgó su vida en la tragedia de San Cristóbal?” y “La Universidad Católica de Santo Domingo le otorgó una beca estudiantil a la joven bombera del Distrito Nacional”.

Fundéu Guzmán Ariza (www.fundeu.do) es una iniciativa de la Fundación Guzmán Ariza Pro Academia Dominicana de la Lengua, institución sin fines de lucro entre cuyos objetivos se encuentra impulsar el buen uso del español en los medios de comunicación de la República Dominicana. Cuenta con la asesoría de la Academia Dominicana de la Lengua, el Instituto Guzmán Ariza de Lexicografía y la FundéuRAE, así como con el patrocinio económico del bufete Guzmán Ariza.