La expresión “Aedes aegypti”, nombre científico del mosquito que transmite el dengue y otras enfermedades, se escribe en cursivas y con mayúscula inicial solo en la primera palabra, recuerda Fundéu Guzmán Ariza.

Sin embargo, en los medios de comunicación se encuentran frases en las que no se sigue esta pauta: “El presidente convocó a una reunión […] las operaciones destinadas a erradicar el mosquito Aedes Aegypti y continuar reduciendo la incidencia del dengue en el país”, “El dengue es transmitido por la picadura del mosquito aedes aegypti, que se cría en aguas limpias” o “El dengue es una enfermedad viral y febril transmitida a través de la picadura del Aedes”.

De acuerdo con la “Ortografía de la lengua española”, los nombres científicos de especies y subespecies de animales y plantas se escriben con mayúscula inicial en el primer componente (que designa el género), con minúscula el segundo y el tercero (específicos de la especie y la subespecie) y en cursiva (o entre comillas, si no se dispone de este tipo de letra), por lo que deben evitarse las formas de escritura enteramente en minúscula o con inicial mayúscula en ambos elementos.

Asimismo, resulta inapropiado referirse a este mosquito utilizando simplemente el nombre del género, “Aedes”, pues este abarca más de un centenar de especies.

Teniendo esto en cuenta, en los ejemplos anteriores lo adecuado habría sido escribir “El presidente convocó a una reunión […] las operaciones destinadas a erradicar el mosquito Aedes aegypti y continuar reduciendo la incidencia del dengue en el país”, “El dengue es transmitido por la picadura del mosquito Aedes aegypti, que se cría en aguas limpias” y “El dengue es una enfermedad viral y febril transmitida a través de la picadura del Aedes aegypti”.

Fundéu Guzmán Ariza (www.fundeu.do) es una iniciativa de la Fundación Guzmán Ariza Pro Academia Dominicana de la Lengua, institución sin fines de lucro entre cuyos objetivos se encuentra impulsar el buen uso del español en los medios de comunicación de la República Dominicana. Cuenta con la asesoría de la Academia Dominicana de la Lengua, el Instituto Guzmán Ariza de Lexicografía y la Fundéu RAE, así como con el patrocinio económico del bufete Guzmán Ariza.