Según Correa Calle, L .F. (2021), la Revolución Industrial representa un hito esencial para explicar la historia reciente de la humanidad, debido al cambio sustancial y profundo que indujo en el modelo de producción y en la estructura de la sociedad en cada una de las cuatro etapas identificadas, por tanto, es pertinente presentar algunos de los cambios que se produjeron o influyeron en la educación.

La Primera Revolución Industrial se concibe como el proceso de transformación económica, social y tecnológica que inició en la segunda mitad del siglo XVIII en el Reino de Gran Bretaña. Luego se expandió a gran parte de Europa occidental y América Anglosajona, concluyendo entre 1820 y 1840. Este período significó el mayor conjunto de transformaciones económicas, tecnológicas y sociales de la historia de la humanidad, provocando el paso de una economía rural basada fundamentalmente en la agricultura y el comercio a una economía de carácter urbano, industrializada y mecanizada (Wikipedia). Se le identifica como la Revolución Industrial 1.0 o Industria 1.0. Schwab (2016) sintetiza los cambios que marcaron cada una de  ellas. En esta entrega se describen las especificadas en el título.

Revolución Industrial 1.0. Utilizó la energía del agua y del vapor, para mecanizar la producción (1784).

Revolución Industrial 2.0. Empleó la electricidad, para crear la producción en masa y generar la división del trabajo (1870).

Revolución Industrial 3.0. Usa la tecnología de la información, para automatizar la producción (1969).

Cada revolución industrial ha tenido un impacto enorme en la sociedad, la economía, la política, la cultura y en la gente. Esto indica que todas las generaciones pasadas tuvieron que lidiar con la innovación de una u otra forma. Sin embargo, a pesar de los cambios vividos como sociedad a través de todos estos años, la educación pareciera que no se ha visto tan impactada. Todo ha cambiado y evolucionado, pero se ven los mismos sistemas educativos que se formaron después de la Primera Revolución Industrial predominando en la gran mayoría de los países del mundo (Parrales, 2019).

En el Preámbulo de la edición digital de Los desafíos de las TIC para el cambio educativo,  Álvaro Marchesi señala: El desarrollo acelerado de la sociedad de la información está suponiendo retos, impensables hace unos años, para la educación y el aprendizaje. Tal vez lo más relevante sea que nos encontramos con una nueva generación de aprendices que no han tenido que acceder a las nuevas tecnologías, sino que han nacido con ellas y que se enfrentan al conocimiento desde postulados diferentes a los del pasado. Ello supone un desafío enorme para los profesores, la mayoría de ellos inmigrantes digitales, para las escuelas, para los responsables educativos y para los gestores de las políticas públicas relacionadas con la innovación, la tecnología, la ciencia y la educación.

La denominación de los modelos que hoy se identifican como Educación 1.0, 2.0, 3.0 y 4.0 hace referencia a un período de la incorporación de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TICs) en la pedagogía en general y en la educación en particular.

Educación 1.0 y Web 1.0. La Educación 1.0 se define como un proceso unidireccional, donde los alumnos adquieren la información generalmente de manera pasiva proporcionada por los docentes para el estudio individual. Estaba centrada en la evaluación a través de exámenes y el trabajo personal. Los contenidos se trabajaban a través de apuntes, artículos, libros de texto, vídeos y en los últimos tiempos de la Web 1.0, los documentos jamás se actualizaban y solo permitían leerse. Empezó en la década de 1960 junto al Internet con navegadores de solo texto. Se conoce como World Wide Web. En la década de 1990 surgió HTML (Hyper TextMarup) como lenguaje hipertexto e hizo que las páginas web fueran más agradables a la vista y pudieran contener imágenes, formatos y colores. La Web 1.0 se refiere a un estado de la World Wide Web. Si bien se consideraba una tecnología de acceso porque difundía información, datos, dejaba poco espacio para la participación y la colaboración entre usuarios de la Red (Rosique, 2010).

Educación 2.0 y Web 2.0. La Web 2.0 es un “concepto desarrollado en el 2004, por Tim O´Really para referirse a las aplicaciones de Internet que se modifican gracias a la participación social” (Ruiz Rey, 2015). Trajo consigo la aparición de grupos de usuarios, las redes sociales, los blogs y las wikis, entre otros. Esto contribuyó a organizar mejor la información en Internet y a difundir más contenidos. En la actualidad, personas de todo el mundo pueden compartir información y entretenerse, comprar, encontrar respuestas a sus preguntas e interactuar entre sí gracias a esta web  (Bello, 2022). Su estrecha correlación con la Educación 2.0 es a partir del constructivismo, que concibe la función docente alejada de todo sesgo impositivo, escolástico y autoritario (Varas, 2003). El modelo 2.0 ha impactado, porque el usuario tiene la capacidad de expresarse libremente y de ser escuchado. En palabras de Santamaría (2007), la educación en sí misma no se transforma de manera significativa a pesar de existir la infraestructura para una amplia transformación, porque las circunstancias en las que se usa la tecnología aún están demasiado incrustadas en la Educación 1.0, debido al peso de la tradición y las estructuras educativas.

Educación 3.0 y Web 3.0. Esta Web  es la tercera generación de servicios de Internet para páginas web y aplicaciones. Se centrará en el uso de una comprensión de datos basada en máquinas para proporcionar una Web Semántica y datificada. Berners-Lee acuño este término para describir una red en la que las máquinas procesarían el contenido de forma similar a la humana y en la que todos los datos estarían conectados y se entenderían tanto contextual como conceptualmente.  Siri de Apple o Alexa son ejemplos de Web 3.0, ya que combinan inteligencia artificial con reconocimiento de voz.

El objetivo final de la Web 3.0 es crear sitios web más inteligentes, conectados y abiertos. Surge en 2006 para relacionar las webs de forma semántica, permitiendo por su estructuración que la información pueda ser encontrada de forma más rápida y eficiente. Consiste en aplicar las ventajas y recursos de las TICs, para contribuir al cambio metodológico y a un modelo de aprendizaje más interactivo, participativo y creativo, que  favorezca a los alumnos y los profesores se conviertan en facilitadores de estrategias de aprendizaje e incluya a todo el personal que participa en los procesos de enseñanza y aprendizaje, y las familias. Como está relacionada con una visión en tres dimensiones abrió nuevas formas de comunicación y colaboración utilizando espacios tridimensionales, dando origen a una educación basada en plataformas, programas y redes. Esta red aún está desarrollándose y afirma  Bello  (2022), que todavía queda mucho camino por recorrer.