Urbe despierta y en acción,

poblada hasta el infinito

de personas que reclaman equidad,

anhelan derechos

y que demandan voz

y ejercicio ciudadano.

Territorio urbano exhausto

por el ruido,

por la dispersión territorial,

por el grito estentóreo de ambulancias,

por el flujo vehicular desorientado,

Por el irrespeto a procedimientos e instancias.

Metrópolis insalubre,

parques de basura,

alfombras de plástico,

mantos de residuos sólidos,

aire endurecido,

chatarras que huelen a muerte,

líquidos enmohecidos

mascarillas inertes.

Santo Domingo, con zonas paradisíacas,

con arquitectura de ensueño,

con susurro de monumentos y árboles

con recuerdos que evocan sueños divinos;

síntesis de poesías, de cantos,

de danza, de teatro.

Ciudad paradójica,

de diversidad humana y artística.

Capital de la alegría que acerca a Dios.

Autora: Dinorah García Romero

Santo Domingo, Distrito Nacional.

29 julio de 2024