La ayuda internacional para los damnificados de la tormenta tropical Óscar -que ha dejado un saldo de siete muertos– comenzó a arribar a Cuba mientras que las labores de recuperación continuaron en las localidades más afectadas en la provincia oriental de Guantánamo, según informó la prensa estatal.
En colaboración con la empresa mexicana Richmeat, con presencia en la isla, la embajada de México donó 100 toneladas de carne molida (picadillo), en 250.000 unidades, de acuerdo con los medios locales.
De igual forma, Naciones Unidas subrayó que distintas agencias, fondos y programas "preparan un plan de acción (…) a fin de sumarse a los esfuerzos de recuperación de las autoridades nacionales concentrados" en las zonas más castigadas.
En ese sentido, el pasado sábado, Unicef confirmó el arribo a la isla de un donativo de 1,5 toneladas de "medicamentos y material gastable". La donación está integrada por 60 kits que incluyen medicamentos como analgésicos, antipiréticos, antibióticos, antifúngicos y otros insumos para casos de emergencia médica.
De igual forma, Unicef señaló que, con apoyo de la Dirección General de Protección Civil y Operaciones de Ayuda Humanitaria Europeas (ECHO), pudo asegurar "1.000 láminas de techos, 680 purlins y 4.700 tornillos" para la reconstrucción de 74 escuelas en la provincia oriental.
Hasta el momento, las ayudas internacionales y los esfuerzos de las autoridades locales se focalizan en las cuatro localidades -todas en Guantánamo- más golpeadas por el paso de Óscar: San Antonio del Sur, Imías, Baracoa y Maisí. Según estimaciones de Unicef, la población afectada asciende a las 149.693 de personas, de las cuales 32.600 (22 %) son niños.
Sobre al apoyo exterior, que ha empezado a arribar a la isla en las últimas horas, se pronunció el pasado miércoles el presidente insular, Miguel Díaz-Canel. En un mensaje en X, el mandatario afirmó que "unos 41 países y varios organismos internacionales se han solidarizado con Cuba".
Hasta el momento, las autoridades isleñas no han podido dar un saldo definitivo de daños materiales y humanos tras el paso del ciclón por la difícil accesibilidad a la zona del impacto.
Aún quedan áreas devastadas incomunicadas donde las lluvias castigaron intensamente con acumulados que provocaron escurrimientos desde las montañas, grandes inundaciones, y en consecuencia la incomunicación, impidiendo el acceso de los grupos de socorristas.
Por otro lado, han persistido las lluvias en la región oriental del país, lo que ha dificultado las labores de recuperación. El viernes, el Gobierno comenzó la evacuación de los pobladores de los municipios orientales de Baracoa (Guantánamo, 80.000 habitantes) y Moa (Holguín, 70.000 habitantes) por las precipitaciones persistentes.
Óscar entró en Cuba el domingo -como huracán de categoría 1 (de 5) en la escala Saffir-Simpson- muy cerca de la ciudad costera de Baracoa, en Guantánamo (este), y se convirtió en una tormenta antes de irse el lunes por una zona próxima a Gibara, en la provincia Holguín (noreste).