El gobierno dominicano ha anunciado que las empresas extranjeras que ofrecen servicios en el país a través de plataformas digitales (tales como Airbnb, Uber, Didi, Netflix, etc.), comenzarán a pagar impuestos como parte de las políticas públicas de regulación a esta actividad económica.
La primera multinacional que entrará en este proceso de fiscalización es Airbnb, que según las autoridades deberá empezar a pagar el impuesto sobre las transferencias de bienes industrializados y servicios (Itbis) a partir de agosto.
El presidente de la Asociación Nacional de Hoteles y Restaurantes (Asonahores), Rafael Blanco Tejera, compartió con ACENTO algunos de los aspectos más importantes de esta iniciativa gubernamental.
En primer lugar, se hace referencia a una de las dudas más frecuentes que ha surgido a raíz de la noticia, ¿las tarifas de Airbnb aumentarán con la aplicación de estos impuestos?
Blanco Tejera explica que cuando los usuarios contraten una habitación por esa vía, tendrán que pagar el costo de la habitación más el 18 % de Itbis, como se hace en un hotel. “Indudablemente van a aumentar (las tarifas de Airbnb) en la proporción del impuesto, igual que en todos los hoteles”, puntualiza.
Estas declaraciones distan de las afirmaciones del director general de Impuestos Internos (DGII), Luis Valdez, quien expresó la semana pasada que la implementación de nuevos impuestos a las plataformas digitales "no viene a gravar a los consumidores".
La formalización de los proveedores de alojamiento digitales pasará por un proceso de regulación que contiene dos aspectos fundamentales: una licencia operacional y la aplicación del Itbis.
La licencia será una acreditación expedida por el Ministerio de Turismo que certificará que ese lugar cumple con las condiciones necesarias para brindar el servicio de hospedaje. En la actualidad, los hoteles y restaurantes tienen que tener avales legales como estos para poder operar y desarrollar sus actividades.
El empresario asegura que esa licencia de operación garantiza que se oferte un producto turístico que tenga la calidad y la seguridad necesaria hacia los turistas.
Blanco sostiene que países como Estados Unidos (de donde son gran parte de las empresas), México, Canadá, Inglaterra, España, Francia e Italia, existen normativas muy similares a las que se pretenden implantar en la nación.
“Es vital regularlas para poder garantizar el crecimiento, la calidad y la seguridad de nuestro producto turístico dominicano”, destaca.
El otro pilar de esta regulación involucra la carga impositiva a la que se ha hecho referencia en ocasiones anteriores, es decir, el cobro del Itbis a estas corporaciones.
Blanco establece que todos los hoteles y comercios de República Dominicana cumplen con sus responsabilidades fiscales, sin embargo, las referidas multinacionales no lo han hecho porque hasta ahora no habían reflejado los niveles de presencia que poseen en República Dominicana.
“Estamos en un punto en el que han logrado la suficiente importancia para que ya amerite la regulación, y eso es todo lo que se está planteando desde el punto de vista fiscal. No es cobrar ningún impuesto adicional a los que pagan todos los hoteles, restaurantes, consultores independientes y los comercios”, aclara.
A continuación las declaraciones del presidente de Asonahores, Rafael Blanco Tejera sobre los impuestos a las empresas de alojamiento virtual:
¿Cuál es la posición oficial de Asonahores en relación a los impuestos que se les empezarán a cobrar a empresas de servicios digitales como Airbnb?
Las plataformas digitales de comercialización de productos turísticos son una realidad a nivel mundial. La situación se está dando debido a que en los últimos años pasaron de ser una cuestión artesanal (algo que algunas personas utilizaban) a ser parte integral de la oferta turística dominicana.
Más de 70,000 habitaciones forman parte de la red de plataformas digitales en República Dominicana versus unas 80,000 habitaciones hoteleras. De manera que nosotros hoy contamos con casi la misma cantidad de habitaciones de plataformas digitales que de habitaciones hoteleras tradicionales.
Nuestra propuesta es sencilla, debido a que ya es una realidad y tienen un impacto real sobre la oferta que hay en República Dominicana, pues que se regulen.
Es vital regularlas para poder garantizar el crecimiento, la calidad y la seguridad de nuestro producto turístico dominicano.
¿Qué impuestos pagan los hoteles que empresas como Airbnb, no están pagando?
Nosotros cuando alquilamos nuestras habitaciones, cobramos el 18 % de Itbis, también cobramos el 10 % de propina legal (en el caso de Airbnb no sé si se terminará cobrando porque ellos no tienen empleados) y después pagamos el impuesto sobre la renta. Eso es lo que pagan todas las empresas que comercializan en República Dominicana.
¿Ustedes han sido consultados por el gobierno para la estructuración de esta medida?
Nosotros incluso le hemos enviado cartas oficiales al gobierno pidiéndole que por favor regule a este segmento, porque ya es algo que nos está afectando desde el punto de vista comercial por el hecho de que hay un grupo que paga unos impuestos y un grupo que no, y también por el hecho de que debemos integrarlos a la regulación y normativa nacional.
Déjeme decirle una cosa, muchos de nuestros socios en Asonahores tienen desarrollo en plataformas digitales; no nos oponemos en nada a las plataformas digitales, es una realidad, es sencillamente formalizar un segmento de la oferta que hasta el día de hoy no está formal.
¿Esta medida no debería pasar por el Congreso Nacional antes de su implementación?
No tiene que pasar por el Congreso porque es cobrarle el mismo impuesto que paga cualquiera, no es un impuesto especial que se le va a cobrar, es sencillamente el Itbis. Todo el mundo paga Itbis, el que vende publicidad, el consultor independiente, cuando uno adquiere cualquier bien o servicio; eso es algo normal.
¿Qué pasaría si Airbnb decide retirarse del país?
El inventario está en República Dominicana, además de que las empresas que están en este tipo de actividad económica, todas tienen acuerdo fiscales con todos los países. En Estados Unidos se paga el impuesto que estamos hablando; es que esa es la norma.
¿Podría decirse que el Gobierno había permitido una competencia desleal?
Yo no quisiera llegar a decir eso, yo sencillamente pienso que es una evolución de la propia plataforma que pasó de un negocio muy pequeño (de unos estudiantes de California) a una empresa multinacional y a una de las empresas mejor valoradas a nivel mundial.
¿Qué beneficios le podrían dar estas regulaciones a estas empresas extranjeras?
Yo pienso que la regulación es importante para los empresarios que están desarrollando proyectos y utilizan esa plataforma o cualquier otra. En la medida en la que nosotros podamos contar con un sector turístico de calidad, nosotros vamos a poder comercializarlo de una manera mucho más efectiva hacia el mundo.
Ese es el punto fundamental de todo esto, nosotros tenemos que garantizar la competitividad de nuestro sector, pero para garantizar la competitividad de nuestro sector tenemos que regularlo y trabajar siempre en la calidad, seguridad, de manera que nosotros no tengamos un negocio hoy, si no un negocio en mucho tiempo.