Fue en el 2001 cuando el Estado promulgó la Ley 87-01 y estableció las bases del Sistema Dominicano de Seguridad Social (SDSS), el cual aborda la cobertura de salud y la necesidad de un retiro digno al final de la vida productiva o cuando así lo decida el adulto, según las normas establecidas en el Código Laboral.
El ministro de Trabajo, Luis Miguel de Camps, afirmó que el Sistema de Seguridad Social es una responsabilidad de todos. Comentó que a 2022, el país registró 10.3 millones de afiliados al SDSS, de los cuales, 5.5 millones de personas estaban en el régimen subsidiado y 4.4 millones en el contributivo. Además, 2 millones de titulares estaban en el régimen contributivo y 2.1 millones eran dependientes.
“Aún la sociedad reclama mejoras y mayores protecciones en el SDSS y es esencial que los actores partícipes dialoguen y conversen sobre las mejoras. No obstante, cualquier aumento de protección debe tener en cuenta la identificación de recursos”, sostuvo.
Ante una posible reforma, De Camps agregó que es esencial una cobertura de salud ampliada y mejorada para los pensionados; ampliar la edad de los hijos con estudiantes en la seguridad social e incluir a los padres en el núcleo familiar del afiliado titular.
“Hay que pensar responsablemente en la identificación económica, donde todos los actores de la sociedad deben ser parte ante una posible reforma… Es decir, la mayoría de los recursos deben ser destinados desde el Estado para eficientar la salud, por ejemplo”, dijo el funcionario.
De acuerdo con la Oficina Nacional de estadística (ONE), los hogares tienen un gasto corriente promedio de RD$ 2,596 mensuales en bienes y servicios de salud. La cifra aumenta a RD$ 2,707 si es en la zona urbana o disminuye a RD$ 2,116 en entornos rurales. Por macrorregión es de RD$ 3,043.2 en el Gran Santo Domingo, RD$ 422.5 más que la región Norte (RD$ 2,620.7) y RD$ 1,332 más que el Sur (RD$ 1,711.2).
“Debe ser financieramente sostenible, pero a la vez debe mejorar la equidad e igualdad de los dominicanos e impactar en la reducción del gasto de salud de las familias”, aclaró.
Julio Virgilio Brache, presidente de la Asociación Nacional de Industrias (AIRD), explicó que el Sistema Dominicano de Seguridad Social es uno de los tópicos más debatidos por la sociedad civil, el sector empresarial y el Estado, debido a que promueve el bienestar de la población.
“Los actores partícipes como la Superintendencia de Pensiones y el Consejo Nacional de Seguridad Social se encargan de mejorar nuestras leyes para la salud, los riesgos laborales y las pensiones, temas que nos preocupan a todos porque generan bienestar y crecimiento socioeconómico”, comentó.
Sin embargo, aclaró que desde el sector privado se plantean preguntas para elaborar propuestas con el fin de mejorar la cobertura.
Citó que en 2010 solo el 6 % de la población dominicana pasaba de los 65 años, pero en 2023 el monto se sitúa en 9 %.
“Tenemos una tasa de natalidad con perspectivas a la baja, cuya población envejecida presenta desafíos de nuestro Sistema de Seguridad Social, por lo que algunas voces plantean un nuevo sistema que responda a las realidades de nuestra población”, comentó.
Estos actores de primera línea permitirán tener una visión holística e integral del sistema para que se pueda consensuar los cambios que el sistema necesita, “es crucial enfrentar los retos pero también la fortaleza y el bienestar para el retiro seguro que debemos tener”.