El lunes de la semana pasada, el huracán Fiona hizo estrago en varias provincias de la República Dominicana, las más afectadas fueron La Altagracia, Hato Mayor, El Seibo, y Samaná, localidades donde el turismo, la agricultura, y la artesanía son las fuentes principales de ingresos de sus residentes.
Los informes oficiales han señalado un impacto mínimo en la infraestructura turística, la Asociación de Hoteles y Turismo de República Dominicana (Asonahores), ha manifestado también, que el impacto sería mínimo, y que no se reporta ningún incidente con turistas ni empleados, y se descartan que se estén registrando cancelaciones de los turistas que pudieran afectar los ingresos financieros de los hoteles.
Muchas personas residentes en esas provincias lo han perdido todo, se reportan centenares de casas destruidas o parcialmente destruidas, la agricultura ha quedado prácticamente devastadas, las microempresas reportan pérdidas en su capital de trabajo, y es muy probable que muchas pequeñas y medianas empresas también hayan sido afectada con el paso del huracán Fiona.
El Gobierno, la sociedad civil, ONGs, organismos de ayudas internacionales, los dominicanos en el extranjero, y también algunas entidades bancarias, como por ejemplo el Banco Popular, y el Banco de Reservas en su rol de responsabilidad social se han solidarizado destinando recursos financieros en auxilios a los residentes de estas provincias afectadas.
Sin embargo, la realidad para los bancos es que posiblemente la cartera de préstamos también saldrá impactada por el paso del huracán Fiona.
Conforme a las últimas informaciones disponibles y publicadas por la Superintendencia de Bancos en su nuevo portal de estadísticas, al cierre del mes de julio del 2022, la cartera de préstamos de estas cinco provincias ascendía a RD$ 102.44 mil millones de pesos, que representa el 6.67% del total de la cartera del sistema financiero dominicano, ascendente a un monto de RD$ 1.536 billones de pesos.
De dicho total, los bancos múltiples concentran el 87.4%; las asociaciones de ahorros y préstamos el 9.5%; los bancos de ahorro y crédito 3.0% y las corporaciones de crédito un 0.2%.
La provincia con mayo colocación de créditos es la Altagracia donde se puede apreciar, que el sistema financiero tiene colocado alrededor RD$ 69.36 mil millones de pesos. Luego les siguen La Romana con RD$ 22.14 mil millones, Samaná con RD$ 5.60 mil millones, Hato Mayor con RD$ 3.12 mil millones y el Seibo con RD$ 2.22 mil millones.
En términos de números de créditos, el análisis revela que un número importante de clientes de los bancos pudieran ser sido impactado por el paso del huracán Fiona, y que es posible que su capacidad de pago para honrar sus compromisos financieros en los próximos meses se vea afectada, impactando de manera negativa la calidad del portafolio crediticio de estas provincias.
Al cierre del mes de julio del 2022, estas cinco provincias acumulaban 329,270 créditos otorgados que representan el 6.5% de un total de 5,021,604 número de préstamos colocados por todo el Sistema Financiero Dominicano.
Como se puede apreciar en los cuadros anteriores, la Provincia La Altagracia, lidera los montos de colocaciones y los números de préstamos otorgados, seguido de la provincia La Romana.
En términos de los sectores económicos donde se concentra la cartera de préstamos en estas provincias, el análisis revela que los sectores económicos más afectados serían Hoteles, Bares y Restaurantes con un 26.9%, seguido por los préstamos de consumo e hipotecarios de las personas, con 26.0% y 17.1%, respectivamente, que en conjunto representan alrededor del 70% de la cartera de préstamos en estas cinco provincias.
Las doce entidades bancarias que pudieran ser más afectadas en sus portafolios de créditos son las entidades de mayor tamaño del sistema financiero (POPULAR, RESERVAS, LEON, SCOTIABANK, APAP, LA NACIONAL), y las entidades que se dedican a la colocaciones de créditos a la micro, pequeña y medianas empresas, estás son: ADEMI Y BANFONDESA.
A modo de conclusión, el análisis revela que, si bien es cierto, las entidades bancarias cuentan con un buen colchón de provisiones para hacer frente a posibles pérdidas en sus carteras de préstamos y mitigar el impacto en sus balances, a consecuencia de un deterioro de la capacidad de pagos de los clientes de los bancos que se encuentran clasificados en los sectores económicos: Hoteles, Bares, Restaurantes, Microcréditos, viviendas, y créditos de consumo en estas provincias.
Lo cierto es, que las autoridades monetarias y financieras, tendrán que ponderar la emisión de una Resolución desde la Junta Monetaria, donde flexibilicen las disposiciones relativas en el Reglamento de Evaluación de Activos, a los fines de que estás entidades puedan reestructurar y reclasificar los préstamos, sin hacer cambios en las provisiones ni en la clasificación crediticias de los clientes afectados, como una forma de solidarizarse con los clientes afectados del sistema financiero en estas cinco provincias.
De no hacerse, la morosidad tanto normal como estresadas calculadas por la Superintendencia de Bancos se elevará en las referidas provincias, y los bancos tendrán que absorber pérdidas importantes en sus portafolios crediticios que de forma alguna afectarían la salud de algunos indicadores financieros del sistema financiero.
La columna “La Banca Dominicana por Dentro”, es desarrollada por Jesús Geraldo Martínez, en el interés de aportar al fortalecimiento del Sistema Financiero Dominicano desde una perspectiva analítica y práctica orientada a la formación de conocimientos y divulgación de informaciones exclusivas de dicho sector. Para contactar con el autor. Email jgmartinez20@icloud.com .