Nuestra Señora de la Altagracia llegó a Marruecos. Situada en el norte de África, Marruecos tiene una superficie de 446,550 kilómetros cuadrados y una población de 36 millones de personas. Marruecos se independizó de Francia y España en 1956. Se encuentra separado de Europa por el estrecho de Gibraltar. Limita con Argelia al este; con España al norte, con quien comparte fronteras marítimas y terrestres; y con el Sahara Occidental al sur.
Marruecos tiene una economía bastante estable con un crecimiento continuo durante el último medio siglo. Cuenta con un turismo bien desarrollado. Los destinos más visitados de Marruecos son Rabat, Casablanca, Marrakech, Fez y Tánger.
La religión mayoritaria es el islam sunita, ya que es practicada por más del 90% de la población. Hay también minorías cristiana, judía, y de otros cultos. El rey es la máxima autoridad religiosa islámica, como comendador de todos los creyentes.
Esta vez visitamos los puertos de Agadir, Casa Blanca y Tánger. Esta fue nuestra tercera visita a Agadir y Casa Blanca, y la primera vez en Tánger.
Agadir, antiguamente era conocida como Santa Cruz del Cabo Aguer. Fundada por los portugueses sobre el 1500, en 1526 es invadida por los saaditas. En 1911 se da la crisis de Agadir. Entre 1912 y 1956 pertenece a Francia, pasando en 1956 la soberanía a Marruecos. El 29 de febrero de 1960 un terremoto destruyó la ciudad, habitada por unas 12,500 personas.
El Festival Timitar, festival beréber y de música del mundo, tiene lugar en Agadir todos los veranos desde su creación en julio de 2004. Uno de los principales recursos de la zona en cuanto a atractivo turístico es el parque nacional de Souss-Massa, en el que se encuentran paisajes notables.
Llegamos a Agadir el 4 de abril y abordamos el autobús de cortesía que nos trasportó hasta la Playa de Agadir. Habíamos estado anteriormente dos veces en esta ciudad, en la que visitamos varios sitios de interés turístico como el fuerte Kasbah Agadidr Oufella, el mercado beréber, el espectáculo de caballos Fantasía, así como una vista panorámica de la ciudad. La Playa de Agadir es una playa hermosa con 12 kilómetros de largo, con un paseo marítimo precioso y lleno de actividades, así como una variedad de restaurantes espectacular. Lamentablemente, ese día había mucha brisa, lo que levantaba mucha arena. Esto hacia muy desagradable la caminata por la playa. Por este motivo optamos por contratar un taxi que nos trasportara al Souk (mercado) el Had.
El mercado es grandísimo y venden de todo, incluyendo artículos comestibles tradicionales como frutas, vegetales, cereales y pollos vivos. Sin embargo, la mayor parte del mercado tiene pequeños negocios que venden artículos de vestir, zapatos y otros artículos de piel, así como pasta de almendra, la cual muelen ahí mismo. Me llamó la atención que muchos negocios tenían una o varias tortugas en una caja. Pregunté para qué tenían las tortugas, y me respondieron que era una forma para que las personas se pararan en su local y así llamar la atención a su negocio. Eran tortugas de tierra.
Como es un país mayoritariamente islámico, no sacamos los lienzos de las imágenes de Nuestra Señora de la Altagracia, por respeto a sus creencias y para evitar situaciones desagradables, ya que éramos turistas de visita en ese país. Por eso, nos limitamos a llevar fotos de las imágenes de la virgen, así como los separadores de libros. Con esta situación se hacía difícil de halar sobre la virgen con los pobladores, aunque logré hacerlo con algunas personas. Oré en mi interior como siempre lo hago. El Ave María llena mi alma y me abre las puertas para continuar con esta peregrinación que es muy importante en mi vida.
Del mercado tomamos otro taxi para regresar a la playa donde tomamos el autobús de cortesía que nos llevó de vuelta al barco. La salida se retrasó debido a los fuertes vientos que hacían la salida del puerto un poco difícil para el barco y el personal del puerto. Esa noche pudimos partir hacia Casablanca.
Después de un día entero de navegación, llegamos a Casablanca el 6 de abril. Casablanca es la mayor ciudad de Marruecos, así como su puerto principal. Tiene una población de 4.3 millones de habitantes. Está considerada el centro económico y comercial de Marruecos, mientras que la capital política es la ciudad de Rabat.
Casablanca acoge la sede de las principales instalaciones industriales marroquíes, así como de empresas internacionales con sede en Marruecos. El puerto de Casablanca es uno de los puertos artificiales más grandes del mundo y el puerto más grande del norte de África. También es la base primaria naval para la Marina Real Marroquí.
Casablanca debe su nombre al hecho de que, antiguamente, los marinos portugueses que cruzaban por este lugar lo identificaban por una pequeña casa blanca situada sobre la colina de Anfa, “a casa branca”. Que el nombre actual, Casablanca en la mayoría de los idiomas, esté en español, parece deberse al período en que ambas coronas estuvieron unidas. Habitual y coloquialmente los lugareños llaman Casa a la ciudad. Anfa es el nombre original autóctono y significa "colina" en lengua beréber. Este nombre se emplea ahora para referirse a los barrios antiguos de la ciudad histórica.
En viajes anteriores tuvimos la oportunidad de tomar una gira por toda la ciudad, incluyendo la mezquita Hassan II. Esta es la mezquita más grande de Marruecos y la segunda más grande en el mundo árabe. Otros sitios de interés incluyen la iglesia católica Nuestra Señora de Lourdes, la Plaza Mohammed V, las playas del Resort Ain Diab, la Nueva Medina (Habous Quarter), el Palacio Real, la Corte Regional, y la Gran Mezquita. En uno de los viajes tomamos una gira a la ciudad Imperial de Rabat, la capital de Marruecos.
Esta vez tomamos el autobús de cortesía que nos dejó en la Plaza Naciones Unidas. Caminamos por la ciudad y entramos al Mercado Central. Este mercado es muy grande, con callejones que se convierten en un laberinto. Hay que tener muy buen sentido de orientación para uno no perderse. En un viaje anterior nos perdimos, pero esta vez utilizamos el GPS del teléfono para no perdernos. Este mercado tiene de todo, incluyendo artesanías. En el lugar hay muchos gatos. La zona donde venden las aves es de un olor muy profundo, por lo que tuvimos que salir rápido. Tienen tiendas de sandalias de cuero super hermosas y lindas, las cuales me encantaron. Les pude comprar a mis amigas que me apoyan en esta maravillosa peregrinación. Mil gracias a Eva Mir y Laura Ferreira.
En una de las tiendas que rodean la plaza, nos atendió un señor muy amable. Con él hablé sobre la virgen y le pregunté si le podía tomar una foto a él con la imagen de la virgen, y me contestó que no. Entonces le pregunté si podía escribir el nombre de la virgen en árabe y me dijo que era muy difícil y que no podía. Entonces le pregunté si podía escribir mi nombre y me dijo que si, pero que el árabe no tiene vocales. Ellos le ponen símbolos encima de las consonantes para representar las vocales. Finalmente tomamos el autobús de cortesía de regreso al barco.
Al día siguiente, el 7 de abril, llegamos a Tánger, el segundo centro industrial de Marruecos después de Casablanca. Los sectores están diversificados e incluyen industria textil, química, mecánica, metalúrgica y naval. La ciudad cuenta con cuatro parques industriales, dos de los cuales cuentan con el estatus de zona franca.
Tánger es también una ciudad turística. A ella llegan turistas europeos, especialmente desde Francia y España. Entre los lugares de interés se encuentran su medina, la gran mezquita y el Museo Dar El Mandoub. Otro lugar destacable es la plaza 9 de abril, una de las más grandes de la ciudad y uno de los puntos de encuentro preferidos por sus ciudadanos. En los alrededores de la ciudad están las Grutas de Hércules y el Cabo Espartel.
Esta fue nuestra primera visita a esta ciudad. Tomamos el autobús de cortesía que nos dejó cerca del Grand Socco (mercado), ubicado en la zona antigua de la ciudad. Caminamos por esta zona, en la que encontramos a una dominicana que vive en Sevilla y estaba de paseo con su hijo. Como Tánger está al norte de Marruecos tiene mucha conexión con España, ya que solo lo separa el estrecho de Gibraltar. El ferry solo toma una hora y tiene varias salidas en el día. La dominicana Juana López se emocionó mucho al ver la imagen de Nuestra Señora de la Altagracia. Le pudimos grabar un video y tomar una foto con su hijo y el separador de libros. Para nosotros también fue una gran emoción encontrarnos con una dominicana en Marruecos.
Tomamos un autobús “hop on hop off” para pasear por toda la ciudad. Esta ciudad es muy bonita e interesante, combinando lo antiguo con lo moderno. Tiene una playa hermosa, amplias avenidas y una arquitectura impresionante.
De regreso en el barco, pudimos apreciar la vista panorámica de las costas de Tánger, así como el Estrecho de Gibraltar y las costas de España. Esa noche pudimos participar de la cena Séder, que es celebrada por la comunidad judía en todo el mundo para conmemorar la pascua (Pésaj) judía. Ésta recuerda el éxodo del Egipto faraónico a través de todo tipo de gestos simbólicos y alegorías que reflejan los sinsabores de la esclavitud y cuyo principal objetivo es transmitir el mensaje de la libertad a las nuevas generaciones. En el barco, el rabino invita a los que quieran participar, y como hubo mucho interés, lo celebraron durante dos noches, ya que no cabíamos todos en una sola cena. Siempre hemos participado de este ritual en cruceros anteriores.
Agradecemos a Acento y a su director, por todo el apoyo brindado, así como a Laura Ferreira por administrar la página en Instagram, y a todas las personas que nos han animado en esta peregrinación de la Virgen de la Altagracia alrededor del mundo. Para dar seguimiento al paso de la Virgen de la Altagracia por Marruecos y disfrutar de más fotos y videos, pueden dirigirse a nuestra página de Instagram @virgenviajaporelmundo. Nuestro próximo puerto es Málaga, España.