En esta entrevista, nos acercamos a la multifacética trayectoria de Ofelia Berrido, una destacada figura de la literatura y la cultura dominicana. Su obra refleja una profunda búsqueda de significado y conexión con la esencia de lo humano. Berrido ha dejado su huella en el panorama literario nacional e internacional.
Con una vida marcada por la exploración intelectual, cultural y académica, Ofelia combina su amor por las letras con un sólido compromiso con la educación y la promoción de la cultura. Conversamos con ella sobre su inspiración como escritora, los pilares que forjaron su voz literaria, el panorama cultural dominicano y su visión para el desarrollo de la literatura nacional.
A través de esta conversación, descubriremos cómo la palabra se convierte en un puente hacia la introspección, la transformación y el diálogo con el mundo.
Ofelia Berrido es novelista, poeta, ensayista, crítica literaria, promotora cultural y pedagoga dominicana. Autora de las novelas: El Sol Secreto y El infiel; de los poemarios Pájaros del olvido y Anacaona (traducida al idioma inglés); así como de trabajos de investigación y coautorias, además, de cientos de ensayos publicados en revistas académicas y en la revista cultural Areíto del periódico Hoy.
Doctoranda en Estudios del Español: Lingüística y Literatura de la PUCMM. Cuenta con un MBA de Braniff Graduate School of Management, Dallas University, Texas; múltiples diplomados, entre ellos los de Tecnología Educativa de Universidad Iberomericana (UNIBE) y la UNPHU. Graduada en Medicina (UASD), Gineco-Obstetricia y Oncología-Ginecológica (MNSA). Ha impartido docencia universitaria por una década en el área de Internacional de UNIBE-FIU; un quinquenio en la UNPHU en el área de posgrado. En esta misma universidad fungió como Directora de la Unidad de Evaluación y Desarrollo Docente y del Dept. de Tecnología Educativa y la Revista Aula. Imparte docencia como profesora titular desde 2018 en la PUCMM y formó parte del “Global Classroom” del Tecnológico de Monterrey. Ha sido jurado tanto de tesis de grado de la Maestría Administración & Negocios y de la Maestría de Proyectos de la UNPHU.
Igualmente, ha sido jurado de los concursos literarios siguientes: Premio Anual de Ensayo Pedro Henríquez Ureña 2024, Premio Anual de Novela Manuel de Jesús Galvan 2022, Premio Anual de Novela 2021, Premio Anual de Ensayo 2019 del Ministerio de Cultura; Concurso de Poesía Joven, Feria Internacional del Libro Santo Domingo, 2019; Concurso de Escritura, “Mujeres inspiradoras” Embajada de Francia, 2018; Concurso de Ensayo, UNPHU; Concurso “El maestro que lee”. Refidomsa 2014; Concurso de Municipal de Literatura, Semana Cultural de Miches, 2012; Concurso Literario Unibe (ensayo y poesía), 2012-2015.
Miembro de: la Academia Dominicana de la Lengua, Ateneo Insular, Grupo Mester, Asociación de Escritores y Guionistas de República Dominicana (AEGRD), Miembro de la Unión de Escritores Dominicanos (UED), de la Society Human Resources Management (SHRM) y de Singularity University-Capítulo República Dominicana.
Ha fungido como asesora estratégica en empresas locales e internacionales; asimismo, ha ejercido las funciones de vicepresidente, directora y gerente en empresas locales e internacionales como lo son: GTE, Verizon, Banco Nacional del Crédito, Abbott Hospitals, entre otros, logrando importantes reconocimientos y premiaciones.
Gerson Adrián Cordero: ¿Qué la motivó a iniciar su carrera como escritora?
Ofelia Berrido: Nunca lo he visto como una carrera propiamente dicha. Es más bien una pasión que hace posible mi existencia. Mi motivación se forjó en la profunda influencia de mi padre, un hombre de gran intelecto, lector apasionado y pensador cuya visión única de la vida me impactó desde muy pequeña. Leía mucho a Goethe y a los existencialistas franceses. Su capacidad para cuestionar la vida y explorar la profundidad del ser me enseñó que cada persona nace con talentos especiales que, al ser cultivados con rigor y pasión, pueden dotar a la vida de un significado único.
Crecí en un entorno en el que la lectura era mucho más que un pasatiempo: era una forma de entender y conectar con el mundo. Los viajes que realizamos —vivir en Puerto Rico y luego en Estados Unidos, mientras mi padre estudiaba en la Universidad de Mayagüez y luego en la Universidad de Columbia, conocer otros destinos como Rumanía, México, Venezuela…— ampliaron mi perspectiva, permitiéndome sumergirme en diversas culturas y religiones. Esta exposición a distintos modos de pensar y sentir despertó en mí una insaciable curiosidad por los grandes interrogantes de la existencia, como la búsqueda de la fe, el estudio de las diferentes creencias y el significado de la vida. Encontré importantes y variadas respuestas en las voces de grandes escritores de diferentes nacionalidades.
Fue precisamente esta amalgama de influencias —el legado intelectual y emocional de mi padre, la sensibilidad artística de mi madre, mis maestros, la riqueza de mis experiencias internacionales y mi pasión innata por la escritura— la que me impulsó a emprender mi camino literario. Así, cada obra, comenzando por mi primera novela, "Diario de una mujer desesperada" (más tarde transformada en "El Sol Secreto"), se convirtió en una forma de plasmar mi propia búsqueda de respuestas y de dar voz a la complejidad y al misterio de la existencia. La literatura se presentó ante mí como un espacio de libertad, donde podía no solo expresar mis inquietudes y emociones, sino también rendir homenaje al ser humano de todos los tiempos. Sola y en mi cuarto, escribía. Fue, en definitiva, la necesidad de dar voz a lo inefable y la convicción de que cada palabra podía transformar el mundo lo que me llevó a iniciar este camino. En realidad, me impulsó la necesidad vital de dar sentido a mi existencia…
GC: ¿Cuáles considera que fueron los pilares fundamentales para consolidar su voz literaria en sus primeros años como autora?
OB: Pilares fundamentales, bonita metáfora Nunca busqué copiar el estilo de otros, por más que los admirara; en cambio, me inspiré en aquellos escritores que, existencialmente, compartían mis inquietudes sobre lo humano. Me atraían profundamente los autores que se aventuraban a responder preguntas que me acechaban constantemente: el determinismo y el indeterminismo, la creencia y la falta de fe, el origen del universo y de la vida humana. La literatura, para mí, debía ir más allá de lo superficial, aportando al desarrollo del alma. De ahí surgió mi admiración por los escritores que encarnan esa pasión por explorar los rincones más profundos de la existencia. La poiesis, para mí, es esencial, independientemente del género literario. No se trata simplemente de producir algo, sino de generar una obra que surja de la intimidad del ser, reflejo de una búsqueda intensa por desvelar y expresar las verdades ocultas de la existencia. La poiesis es muy importante para mí, porque creo firmemente que cada creación es fruto de un diálogo íntimo entre la inspiración y la técnica, entre la intuición y la reflexión. Es un compromiso con la autenticidad y la exploración, donde la obra no solo comunica, sino que transforma, invitando tanto al autor como al lector a un viaje de descubrimiento y reflexión sobre la esencia de la vida. Ese es el tipo de literatura que aspiro a producir…
En este proceso se forjaron tres pilares esenciales en mi escritura. Primero, la autenticidad: me comprometí a escribir desde el alma, sin disfrazar mis inquietudes ni suavizar las contradicciones que hacen única la experiencia humana. Segundo, el diálogo con la tradición y la contemporaneidad: aprendí a escuchar a los grandes narradores del mundo (los clásicos) mientras me sumergía en la vanguardia literaria, permitiéndome crear un puente entre lo ancestral y lo moderno. Y tercero, el compromiso con la palabra: la lectura constante, el ensayo disciplinado de la escritura y la apertura al intercambio con otros escritores y críticos fueron fundamentales para pulir mi estilo y afirmar mi lugar en el panorama literario. Estos elementos se entrelazaron en mi camino y consolidaron mi voz como autora, impulsándome a explorar sin temor la profundidad de la existencia y a transformar cada interrogante en una oportunidad para enriquecer el alma a través de la palabra.
GC: ¿Está trabajando actualmente en algún libro o proyecto literario?
OB: Sí, así es… Estoy editando varios libros. Este año pretendo publicar los libros de ensayo, los cuales ya están terminados, pero se encuentran en proceso de edición. Si logro publicarlos todos, el próximo año publicaré una novela que se encuentra en las mismas condiciones. He aprendido a no revelar temas ni títulos hasta que las obras salgan a la luz pública. Actualmente, me encuentro en el proceso de presentar y publicar mi tesis de doctorado de Estudios del Español: Lingüística y Literatura de la Pucmm. Mientras, sigo publicando en la revista cultural Areíto.
GC: ¿Cuál es su percepción sobre el panorama literario nacional en cuanto al apoyo a los escritores y la difusión cultural?
OB: El ámbito literario dominicano se encuentra en una etapa de contrastes. Por un lado, resulta inspirador observar cómo emergen nuevas voces y se renuevan tradiciones, lo que evidencia una creatividad vibrante y un profundo compromiso con la cultura. Por otro lado, persisten desafíos significativos, entre los que destacan: los recursos destinados al sector literario son limitados, lo que afecta tanto la producción como la promoción de obras; la difusión restringida, la literatura nacional enfrenta dificultades para alcanzar audiencias internacionales; la ausencia de estrategias gubernamentales robustas impide el pleno desarrollo del talento local. Estos obstáculos, en ocasiones, opacan la pasión y el empeño de los escritores, aunque la esperanza reside en la acción colectiva y en una creciente conciencia social sobre el valor de la palabra.
Sin embargo, es fundamental reconocer el respaldo de diversas instituciones que han contribuido a la promoción de la literatura dominicana, tales como: El Grupo Corripio con iniciativas como el Premio Nacional de Literatura; el Premio Nacional Feria del Libro Eduardo León Jimenes; el Banco de Reservas, pionero en la promoción global mediante sus publicaciones y plataformas de libros dominicanos; el Banco Central que aunque cuenta con programas para publicar obras de autores dominicanos, aún requiere mayor claridad y fortalecimiento en la promoción internacional de estos títulos; la Editora Nacional del Ministerio de Cultura; Infodosu con su Colección de clásicos dominicanos. En general las editoras nacionales, a pesar de sus esfuerzos significativos para publicar obras de calidad, la expansión global de la literatura dominicana sigue siendo un reto pendiente.
Paso a proponer algunas iniciativas: continuar impulsando la creación de portales digitales y redes sociales dedicadas a la literatura nacional, donde se difundan entrevistas, reseñas, podcasts y otros contenidos multimedia que acerquen las obras a un público global; colaboración activa entre el Ministerio de Cultura, medios y editoras internacionales. Fortalecer la cooperación con editoriales y medios de comunicación extranjeros para la traducción y difusión de obras dominicanas, facilitando su entrada en nuevos mercados. Se necesita un rol más activo de embajadas y embajadores: conectando a escritores, editores y gestores culturales con sus contrapartes internacionales, creando oportunidades de colaboración y mayor visibilidad. Desde estos espacios se pueden promover iniciativas que incentiven la traducción de obras. Convenios multisectoriales: establecer acuerdos entre gobiernos, instituciones culturales, editoriales y el sector privado para desarrollar proyectos integrales que impulsen la cultura y la literatura. Además, la incorporación de entidades internacionales como la UNESCO y otras organizaciones globales que puedan ofrecer apoyo, recursos y una mayor visibilidad a la literatura dominicana. Solo a través de estas y otras iniciativas integrales se podrá transformar el panorama y construir un entorno más justo y propicio para el desarrollo de la literatura dominicana.
GC: ¿Qué consejo ofrecería a quienes desean dedicarse profesionalmente a la escritura?
OB: A quienes sueñan con dedicarse a la escritura, les diría que abracen la autenticidad y la disciplina por igual. Es fundamental que escuchen su voz interior, esa que nace de lo más profundo y que, a menudo, resuena con las verdades que otros no se atreven a expresar. La lectura voraz, el constante ensayo y la apertura al diálogo con otros creadores son herramientas indispensables para crecer y evolucionar. Además, que no teman al error ni a la crítica; cada tropiezo es una lección y cada comentario, una oportunidad para mejorar. Finalmente, cultiven la perseverancia, porque el camino del escritor es tanto un viaje interior como un compromiso con la transformación espiritual, social y cultural.
Nota: Gerson, cierro este diálogo dándote las gracias por prestar tu espacio, tus redes sociales y tu escritura a la promoción de la literatura dominicana. Te deseo muchos éxitos como escritor y como promotor cultural. Todos te lo agradecemos.