La Coalición por los Derechos y la Vida de las Mujeres atribuyó la muerte de Adilka Féliz, a la "mala práctica legislativa", por lo que exigió la aprobación urgente de las tres causales en el Código Penal de República Dominicana.
Féliz, una joven economista que trabajaba como asistente legislativa, murió en circunstancias que la coalición considera que podrían haberse evitado con la terminación oportuna del embarazo.
La coalición recordó que las tres causales son situaciones extremas: cuando la vida de la mujer está en riesgo, cuando el embarazo no dará vida (es inviable) y cuando es resultado de incesto o violación.
En República Dominicana, el Código Penal impone penas de hasta 20 años para el personal médico que termine un embarazo, incluso en estas tres circunstancias. La coalición criticó esta postura, argumentando que equiparar el valor de la vida de una mujer al de un embrión demuestra un poco aprecio por la vida de la mujer.
“Los legisladores y líderes religiosos que insisten en que la vida de la mujer y del embrión valen lo mismo y que la interrupción del embarazo solo es permisible cuando los médicos han tomado todas las medidas y agotado todos los recursos posibles para preservar ambas vidas, que miren bien las consecuencias de sus actos”.
La coalición también criticó la postura de los legisladores que rechazan las causales, argumentando que pone en riesgo la vida de las mujeres y coloca a los médicos en una difícil posición.
Según la coalición, el rechazo a las causales solo muestra la miseria moral de la clase política, ya que es un atentado contra la dignidad, la salud y la vida de las mujeres.