En guaguas y a pies, bajo un cielo medio nublado y con un calor que no daba tregua, decenas de manifestantes y activistas se dieron cita en la explanada del Edificio de Oficinas Gubernamentales presidente Prof. Juan Bosch Gaviño, para escenificar una protesta en reclamo de la modificación del proyecto de Código Penal.
A las 4:37 p.m., mientras los activistas entraban al lugar, los agentes de uniforme gris -Policía Nacional- salía y se apostaba detrás de las vallas, que rodeaban el edificio.
La canción El Castigador de la artista dominicana Rita Indiana armonizaba el lugar, mientras los activistas se apresuraban en vestir con un t-shirt blanco, con un mensaje con letras azul, rojo y negro: “Un mejor código que proteja derechos, que supere el pasado y enfrente la impunidad”.
Esta es la segunda ocasión, que movimientos y organizaciones como la Confederación Nacional de Mujeres Campesinas (Conamuca), Participación Ciudadana, Coalición Ciudadana Cambiemos, Movimiento de Mujeres Dominico Haitiana (Mudha), entre otros protestan frente al Palacio Nacional por el proyecto de ley que modifica el Código Penal que ya fue aprobado por el Senado y debe ser conocido por la Cámara de Diputados, el cual excluye las tres causales.
“Si a me violan y yo quedo embarazada, voy a abortar. Nadie sabe todo lo que sufre un niño cuando no le demuestran amor… no me digas tu a mí que si me pasa eso yo voy a demostrarle amor. Que aprueben eso ya”, se escuchó decir a una manifestante.
En esta ocasión, además de las causales, los presentes demandaron atención a temas como la corrupción, la prohibición de protestas (art. 333), la exclusión penal de las iglesias (art. 14), tener más mujeres en la política, entre otros.
“Este código penaliza las protestas, categorizándonos de vándalos. Si este Código Penal estuviera en vigencia ahora mismo estuviéramos todos presos con hasta diez años de cárcel”, expresó la enfermera, Francisca Peguero.
Mientras se aproximaba la hora de inicio de la actividad, algunos activistas con pañuelos verdes y letras blancas, amarrados en sus muñecas, movían sus manos con abanicos de cartón con los mismos colores de los pañuelos, mientras otros tomaban agua de una cajita azul para combatir el calor.
“Hay Gatorade, agua, refresco… todo bien frío. Aprovechen que el calor mata y e’to va para largo”, vociferaba un vendedor, mientras arrastraba una neverita paseándose entre los participantes. De igual forma, un hombre con una funda transparente colgada en su brazo derecho, la cual contenía en su interior cornetas azules, rojas, verdes, amarillas, y rosadas para su venta.
Pasada una hora, la integrante de la Coalición por la vida y los derechos de las mujeres, Natalia Mármol toma el micrófono e insta a los presentes a vociferar “Por un Código Penal que proteja los derechos”, como símbolo de un grito de lucha. La referida frase fue repetida varias veces por los presentes, indicando que la pieza legislativa viola, discrimina y margina a las mujeres dominicanas.
“Un Código Penal que le dice a las iglesias y a la policía, violen y arrebaten derechos… no es justo. Por eso necesitamos un Código Penal que proteja los derechos”, grita Francisca Peguero, al retomar la palabra.
"Reclamar algo tan mínimo que da hasta vergüenza"
Seguido Natalia anuncia cuatro presentaciones explicando que, sin actividades artísticas, una protesta no funciona.
La primera función fue monólogo presentando por el Teatro Alternativo. Mariel Sención fue la protagonista de esta obra, la cual reflejaba el matrimonio infantil, el embarazo adolescente y las consecuencias de no tener las 3 causales en la pieza legislativa.
Entre aplausos y gritos, la artista dominicana Issade tomó el micrófono para iniciar con la segunda presentación con la interpretación de su sencillo Romo y cualto.
“Me encantaría no tener que vernos en estas circunstancias, pero estamos aquí una vez más, utilizando nuestra voz frente al Palacio Nacional para reclamar algo tan mínimo, que da hasta vergüenza, pero aquí estamos y seguimos resistiendo”, dice Issade, y entona dos canciones más.
En la tercera presentación figura la Stand-up Comedy, Laura Nanita. Seguido, los micrófonos pasaron a las manos de María Teresa Cabrera, excandidata a la presidencia de la República; Natanael, representante de la Juventud Barrial; Daniela de Conamuca y Elena Lora de Reconocidos, quienes leyeron el documento integro de la protesta.
“Señor presidente Luis Abinader, jefe de Estado y principal líder del PRM, y toda la dirigencia de su partido, el cual por primera vez tendrá mayoría calificada en el Congreso Nacional, es momento de asumir los compromisos que hicieron con el pueblo dominicano y garantizar un Código Penal que cuide a la niñez, proteja la vida y la salud de las mujeres, enfrente la discriminación, no ponga trabas para perseguir la corrupción y no otorgue un trato especial a las iglesias y militares. El país está observando”, expresan.
La última presentación llega a cargo del exponente urbano Inka, quien interpreta una canción titulada Justicia. Le siguen niños y adolescentes bailando al ritmo de gagá, así como el encendido de velas, simbolizando una vigilia.