El general Juan Carlos Torres Robiou, exdirector del Cuerpo Especializado de Seguridad Turística (Cestur) reflejó serias inconsistencias en sus bienes adquiridos, cuya procedencia no justifica.

Así lo afirmó este jueves el fiscal Jonathan Pérez Fulcar, durante la lectura de la acusación del juicio de fondo del caso Coral, en el que el Ministerio Público presentó un informe de la Cámara de Cuentas ante las juezas del Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional, que confirma diversas inconsistencias.

También detalló que el coronel José Núñez de Aza, señalado como el "cerebro financiero" del supuesto entramado dirigido por Adán Cáceres Silvestre en el Cuerpo de Seguridad Presidencial (Cusep), adquirió propiedades y vehículos millonarios cuya adquisición carece de justificación financiera legítima.

Además, se reveló que el general Julio Camilo de los Santos Viola habría utilizado a sus suegros como testaferros para encubrir fondos provenientes de actos de corrupción durante su gestión en el Cusep.

El expediente también detalla que Santos Viola adquirió cuatro apartamentos en Gazcue, uno de los cuales está registrado a nombre de su suegra, valorado en 2 millones 600 mil pesos, sin justificación clara sobre el origen de los fondos utilizados para la compra.

En este proceso judicial el Ministerio Público acusa a 30 personas físicas y 18 personas jurídicas, acusadas de defraudar al Estado dominicano con más de RD$ 4,500 millones.