La Fundación Institucionalidad y Justicia (Finjus) señaló la importancia de la participación ciudadana para la prosperidad social, reforzando la necesidad del respeto a la libertad y la protección de la dignidad humana, en un artículo publicado recientemente, además, destaca su valor para favorecer la eficiencia y la corresponsabilidad en los procesos políticos e institucionales del Estado.

"Estamos viviendo un momento especial que requiere reformas continuas en nuestra legislación para adecuarla a las demandas de un mundo global y complejo", señaló Servio Tulio Castaños, vicepresidente ejecutivo de Finjus, tras un encuentro con la Sociedad Civil de EuroLat.

La ciudadanía, indicó Castaños, mediante estos mecanismos de participación, juega un papel fundamental en el diseño e implementación de las políticas públicas y en establecer las prioridades en las reformas legales necesarias.

Subrayó que el derecho a la participación ciudadana en los procesos políticos ya está consagrado en la Constitución Dominicana que, desde su creación, apunta a procurar el bienestar ciudadano y la protección efectiva de derechos fundamentales.

Según datos recogidos por Finjus, el avance y consolidación de las ideas y principios democráticos en los últimos 30 años ha fortalecido los regímenes políticos que buscan la prosperidad social a través de instituciones robustas y un ambiente seguro.

La Fundación indicó que aplaude las iniciativas que fomentan la creación y fortalecimiento de mecanismos para la participación ciudadana, y alienta la aprobación de las leyes y regulaciones que amparan esta participación. Además, dijo estar comprometida con el fomento de múltiples instrumentos para la participación, como talleres educativos y mesas de diálogo, y celebra las iniciativas del Poder Legislativo en este sentido.

EuroLat y Sociedad Civil

La Asamblea Parlamentaria Euro-Latinoamericana (EuroLat) es la institución parlamentaria de la Asociación Estratégica Birregional, establecida en junio de 2006.

Eurolat asegura valorar sus relaciones con la sociedad civil como vital para la democracia. Su reglamento interno estipula que un vicepresidente europeo y latinoamericano deben encargarse de estas relaciones en cada región. Se mantienen en contacto con ONGs, sindicatos y organizaciones empresariales. Los encuentros de Eurolat con la sociedad civil son un elemento destacado en las bi-anuales reuniones de la Asamblea de Eurolat, abiertas a sus 150 miembros.