| Esta es la tercera parte del reportaje: "Justicia y Prensa: encontrando el equilibrio entre el derecho a saber y el derecho a un juicio justo" |
En los últimos años, el Poder Judicial de la República Dominicana ha experimentado importantes avances, con un enfoque en la modernización y la eficiencia del sistema de justicia.
Bajo el liderazgo del presidente de la Suprema Corte de Justicia, Luis Henry Molina, se han implementado diversas iniciativas que buscan mejorar la administración de la justicia penal, fortalecer la transparencia y rendición de cuentas, y facilitar el acceso a la justicia para los sectores más vulnerables de la sociedad.
Uno de los ejes más destacados es la reforma en la administración de justicia penal, con la adopción de medidas para agilizar los procesos penales. Se han creado herramientas que optimizan los plazos procesales, evitando los retrasos prolongados que suelen afectar a las partes involucradas.
Un aspecto clave en esta reforma ha sido el fortalecimiento del rol de los jueces de ejecución de la pena, quienes ahora cuentan con mayores capacidades para supervisar el cumplimiento de las condenas y garantizar una correcta ejecución de las mismas.
En cuanto al fortalecimiento de la transparencia, el Poder Judicial ha trabajado para que las decisiones judiciales lo sean cada vez y también accesibles, lo mismo la rendición de cuentas.
Se han publicado estadísticas y datos sobre el funcionamiento del sistema judicial permitiendo una mayor supervisión ciudadana y fomentando una cultura de rendición de cuentas.
Esto ha ayudado a que la población tenga un mejor entendimiento del trabajo que se realiza en los tribunales y a generar confianza en la justicia.
Un tercer pilar de esta gestión es la capacitación y formación judicial. A través de la Escuela Nacional de la Judicatura, se han fortalecido los programas de formación continua para jueces y otros actores clave del sistema judicial.
Estas capacitaciones han mejorado la calidad del trabajo de los jueces, así como su desempeño en los tribunales, lo que contribuye directamente a la eficiencia de los procesos judiciales.
Otro logro importante ha sido la mejora al acceso a la justicia. Consciente de las dificultades que enfrentan los sectores más vulnerables, el Poder Judicial ha impulsado la creación de centros de atención a los usuarios, donde se ofrece asistencia legal a personas que no cuentan con representación.
Además, se ha promovido el uso de la mediación y otros métodos alternativos de resolución de conflictos, reduciendo la necesidad de juicios largos y costosos.
Finalmente, uno de los aspectos más destacados de esta gestión ha sido la descongestión de los tribunales. Gracias a un plan de modernización que incluye la automatización de procesos y la redistribución eficiente de recursos, se ha logrado reducir el cúmulo de casos pendientes.
Esto ha mejorado considerablemente la eficiencia de los tribunales, acortando los tiempos de espera para la resolución de los casos y brindando una respuesta más rápida a las necesidades de la ciudadanía.
En resumen, estos avances reflejan el compromiso del Poder Judicial con la modernización para adaptarse a las exigencias de la sociedad dominicana, ofreciendo un sistema de justicia más eficiente, accesible y transparente para todos.
La gestión actual ha sentado las bases para un futuro judicial más justo y equitativo, demostrando que la reforma y la innovación son posibles dentro de uno de los pilares fundamentales del Estado.