La Universidad Autónoma  de Santo Domingo (UASD), a través de la Escuela de Psicología de la Facultad de Humanidades, llevó a cabo el simposio  “Salud Mental en la Comunidad”, con el tema prevención del suicidio, el cual estuvo a cargo de los psicólogos clínicos Natacha Degaudenzi y Pedro José Vásquez.

La actividad que se enmarca dentro de la conmemoración del Día Nacional del Psicólogo, fue presidida por la directora de la Escuela de Psicología, maestra Rosa Ester Martínez , quien ofreció las palabras de agradecimiento,  al tiempo que motivó a los estudiantes a enriquecer sus conocimientos a través de los importantes expertos en esa área del conocimiento.

La doctora Degaudenzi, en el marco de su exposición  abordó el tema de su tesis de grado en la cátedra  clínica, donde enfatizó la importancia que tiene el estudiante de consultar ese tipo de documento para  seguir investigando sobre el comportamiento del ser humano y así poder dar un mejor diagnóstico a los pacientes.

Definió la Psicología Clínica como una disciplina científica profesional con historia  e identidad propia, que tiene como objetivo la evaluación, diagnóstico, tratamiento e investigación en el ámbito de los trastornos psicológicos mentales.

Mientras que el coordinador de cátedra de psicología, maestro Pedro José Vásquez tocó el tema sobre la prevención del suicidio, expresando en una guía práctica para reconocer cuando un paciente necesita ayuda psicológica al momento de padecer depresión.

Dijo que la primera pregunta es saber si el paciente ha pensado en un intento de suicidio para recabar cualquier conducta anómala o expresión verbal que haga sospechar a los familiares sobre esa posibilidad para saber cómo tratar al paciente.

Si el individuo coopera, puede manifestar tales deseos, lo cual denota inconformidad del sujeto con su propia existencia y es el preludio de una futura idea suicida, dando así la voz de alerta para empezar hacer una serie de terapias para cambiar lo que piensa el paciente en ese momento.

Manifestó que los adolescentes  son los más difíciles de ayudar a persuadir para que no comentan el error de querer quitarse la vida, porque estos no dan señales y se mantienen callados; y solo su lenguaje corporal descubierto por expertos se podrán dar cuenta de que existe un problema de esta magnitud.

Subrayó que no es lo mismo tener deseos de morir o pensar quitarse la vida, ya que muchos llegan a su consulta porque piensan que su vida no vale la pena y se trata a este paciente con terapias para reconocer lo hermosa que es la vida, mientras que el que tiene un plan suicida ya sabe cómo y cuándo lo puede hacer.

comunicó que para tratar a personas con trastornos suicidas se debe buscar antecedentes familiares, porque muchos de los pacientes cuando se sienten atrapados en un problema que creen que no tiene salida, copian conductas inadecuadas de familiares que ya lo han hecho y piensan que son héroes a seguir por la valentía de quitarse la vida.

Dijo que existen muchos factores que inciden en una persona que tiene trastornos mentales: como es el desempleo, la falta de inclusión en la sociedad, la falta de comunicación, problemas con la pareja, problemas familiares entre otros.

Agregó también que hay momentos donde la persona no reacciona a los tratamientos orales ni a las terapias en la consulta, entonces se acude a internamiento para darle otro tipo de trato que lo ayuden a salir de esa situación en la que se encuentra.