El reajuste de pensiones para los médicos se ha convertido en un tema de debate en República Dominicana debido a los efectos de la inflación en el poder adquisitivo de los jubilados, según el doctor Clemente Terrero.
El sistema de pensiones estatales en el país tiene su origen en 1846, cuando se otorgaron los primeros beneficios a militares con invalidez, veteranos de la independencia y ciudadanos con más de 40 años de servicio, conforme a la Ley 79, informó el exdirector del hospital Robert Reid Cabral.
En 1943, la Ley 168 sobre Concesión de Pensiones del Estado estableció que ninguna persona podría recibir una pensión estatal sin una legislación especial que la autorizara, especificando el beneficiario.
En 1981, la Ley 379 permitió al Presidente conceder pensiones vitalicias a empleados y funcionarios que hubieran servido en dependencias estatales, con cargo al Fondo de Pensiones y Jubilaciones Civiles.
Terrero señala que el monto de las pensiones se mantuvo fijo durante décadas, ya que la economía dominicana no enfrentaba niveles significativos de inflación, permitiendo que los pensionados conservaran su calidad de vida.
Sin embargo, según Terrero, el actual modelo económico ha generado un incremento en la inflación, afectando el valor del dinero y la capacidad adquisitiva de los pensionados, lo que hace necesario un ajuste periódico de las pensiones.
El doctor Terrero propone que los médicos pensionados sean incluidos en los aumentos salariales negociados por el gremio con el Estado, garantizando así una mejora en sus condiciones de vida.
Finalmente, enfatiza que un reajuste de pensiones no debe limitarse solo a los médicos, sino extenderse a todos los pensionados del Estado para asegurar la paz, la equidad y la justicia en el sistema de seguridad social del país.