Mientras delegados del mundo entero esbozan en París un posible acuerdo para poner fin a la grave contaminación por plásticos, algunos países o regiones no han esperando para tomar medidas concretas. El pequeño pueblo de San Pedro la Laguna en Guatemala prohíbe desde 2016 las bolsas y envases de plástico.

El municipio de 11.000 habitantes en el altiplano de Guatemala, San Pedro La Laguna, fue pionero en la prohibición del plástico. Desde 2016 prohíbe a los habitantes el uso de bolsas, envases y recipientes de plástico de un solo uso como bolsas, pajillas y poliestireno o duroport. "Había demasiados residuos para la planta de tratamiento", recuerda Nancy González, activista maya de San Pedro La Laguna.

La militante ha viajado hasta París, Francia, para seguir la segunda ronda de negociaciones hacia un tratado contra la contaminación plástica, y que inició el 29 de mayo bajo la égida de la ONU.

"La industria del plástico se resistió e impugnó ante la Corte de Constitucionalidad esta medida del Municipio de San Pedro La Laguna. Sin embargo, los magistrados de la Corte dijeron (…) la decisión de la municipalidad era válida", relata Nancy González.

"El acuerdo fue un éxito por cuatro años, pero la pandemia (de Covid19) vino a retroceder esos avances. Hubo un miedo terrible a contagiarse, entonces todo el mundo volvió a usar plástico. Estamos retomando el acuerdo para que otra vez dejemos de usar estas bolsas", reconoce la activista, entrevistada por RFI.

Con los esfuerzos de sus habitantes, San Pedro La Laguna produce menos plástico, pero sigue enfrentando un problema de contaminación plástica procedentes de otras zonas del lago. "Dentro de la cuenca hay botaderos a cielo abierto. Entonces cuando llueve, estos residuos caen directamente al lago. Y el viento del norte nos lleva esta basura que acaba en las playas de San Pedro", lamenta Nancy González. La cantidad de desechos plásticos es tal que obliga a los habitantes -principalmente mujeres- a recoger el equivalente de al menos dos camiones de residuos.

Al igual que muchos otros representantes de la sociedad civil consultados por RFI en el marco de las negociaciones, Nancy González espera que las discusiones en París permitan avanzar hacia un acuerdo ambicioso para limitar al máximo la producción de plástico, y que no se limite a impulsar políticas de reciclaje, una solución que preconiza el sector industrial que depende del plástico, con países como Arabia Saudita, grandes productores de petroleo, materia prima del plástico.

La eliminación de los productos plásticos de un solo uso es una medida que varios países o municipios han decretado como medida eficaz para reducir la cantidad de basura de este tipo. En enero de 2022, por ejemplo, Francia prohibió los envases plásticos para frutas y verduras.