Por primera vez, los padres de una niña judía francesa de 12 años que fue violada la semana pasada por tres adolescentes, uno de 12 años y los otros dos de 13, han hablado en exclusiva con Le Parisien sobre el caso. Explican el clima de violencia antisemita en el que vivía dese el 7 de octubre la niña, que por su seguridad ocultaba que era judía.
En una entrevista concedida a Le Parisien, sus padres de la niña violada el 15 de junio en Courbevoie (región parisina) afirman que su hija está "muy conmocionada" y "duerme mal por las noches". "Sus agresores le robaron su infancia", afirma la pareja, que califica los crímenes de "actos claramente antisemitas vinculados a la importación a Francia del conflicto entre Israel y Hamás en la Franja de Gaza". La niña, que conocía a uno de los agresores, fue "castigada" por ser judía, insiste la pareja.
Según el relato de la madre, uno de los tres chicos más jóvenes, que conocía a la estudiante, se enteró de que había mentido sobre su religión, afirmando que era musulmana, y dedujo que era necesariamente "proisraelí" y anti-palestina. La madre asegura, sin embargo, que "la realidad es muy diferente", porque su hija, al igual que la pareja, "está a favor de la paz".
En la entrevista con Le Parisien, la madre describe un ambiente de "antisemitismo pesado, visible y palpable" en la Francia actual.
Saludos nazis en la escuela
“Después del 7 de octubre, nuestra hija fue acosada en su colegio y condenada al ostracismo por su religión. Comenzó en noviembre con saludos nazis, esvásticas en las mesas del colegio y bromas sobre el Holocausto. Ha perdido así a varios amigos musulmanes, pero no había llegado a la violencia física. En este contexto ya de por sí muy tenso, le aconsejamos que se mantuviera prudente ante las preguntas relacionadas con la religión. Por eso tuvo que decirle a F. (menor de 12 año y compañero) unas semanas antes del incidente que era musulmana”, explica en la entrevista.
“En algunos sectores de la opinión pública, Israel es visto como el agresor del pueblo palestino, y los judíos franceses son señalados y denunciados por unos hechos ocurridos a varios miles de kilómetros. No estamos viviendo un antisemitismo residual [expresión utilizada recientemente por el líder de La Francia Insumisa, Jean-Luc Mélenchon], sino un antisemitismo fuerte, visible, palpable. Nuestra hija lo experimentó de primera mano en la escuela antes de ser objeto de lo impensable el 15 de junio”, sostuvo el padre.
La niña denunció el incidente a la policía poco después de los hechos. La menor explicó que había sido abordada por tres adolescentes y arrastrada a un cobertizo cuando se encontraba en un parque cercano a su casa con una amiga.
Los sospechosos la agredieron y "la obligaron a someterse a penetraciones anales y vaginales y a felaciones, mientras la amenazaban de muerte y le hacían comentarios antisemitas", añadió la fuente policial. Su amiga consiguió identificar a dos de los agresores. La adolescente fue atendida por los bomberos y trasladada a una unidad médico-judicial cercana.
“Antes de soltarla, le hicieron jurar por Alá que no diría nada, que no debía contárselo a nadie, ni a sus padres, ni a la policía. Incluso le pidieron que se convirtiera al islam”, indicó la madre.
Manifestación de odio entre los niños
"Queremos que la gente despierte y haga la distinción entre un grave conflicto que tiene lugar en el extranjero y, por otro lado, los judíos franceses", subraya la pareja. Esperan que "la sociedad francesa tome plena conciencia del nivel de violencia y odio que unos niños de 13 años son capaces de mostrar hacia otro niño, con el pretexto de que es judío".
El caso ha conmocionado al país y se ha metido de lleno en la campaña para las elecciones legislativas anticipadas, cuya primera vuelta se celebra el próximo domingo. Los dos jóvenes de 13 años fueron acusados de "violación colectiva", "agresión sexual en grupo", "intento de extorsión", "violencia en grupo", "amenazas de muerte e insultos basados en la religión". Permanecen detenidos. El tercer menor se libró por los pelos de la detención porque no era mayor de edad -fijada en 13 años- y figuraba como testigo en el caso. Aun así, ha sido acusado de varios delitos.