La región de Nagorno Karabaj ha perdido ya a casi toda su población armenia, con la entrada de más de 100.000 refugiados en la vecina república de Armenia después de la victoriosa ofensiva militar azerbaiyana, indicó este sábado el gobierno de Ereván.
El nuevo balance fue ofrecido por Nazeli Baghdassarian, portavoz del primer ministro armenio, Nikol Pashinian. Según las cifras oficiales, unos 120.000 armenios vivían en este territorio montañoso enclavado en Azerbaiyán antes de la ofensiva relámpago con la que las fuerzas de Bakú recuperaron este mes el control efectivo de la zona.
Tras esa ofensiva, que obligó a capitular a las fuerzas armenias el 20 de septiembre, los separatistas de Nagorno Karabaj anunciaron este jueves la disolución para el 1 de enero próximo de su república, proclamada hace tres décadas. "Quedan algunos cientos de funcionarios, urgentistas, voluntarios y personas con necesidades especiales, que también se están preparando para partir", escribió en la red social X, antes conocida como Twitter, el ex mediador para los derechos de Nagorno Karabaj, Artak Beglarian. Según precisó, estas informaciones "no son oficiales".
La ONU anunció el envío este fin de semana de una misión a Nagorno Karabaj para evaluar las necesidades humanitarias. En pocos días, más del 80% de los armenios de Nagorno Karabaj abandonaron así sus hogares, por miedo a las represalias de las fuerzas azerbaiyanas y pese a los llamados de Bakú a permanecer en sus casas.
Muchos de esos armenios quemaron incluso sus efectos personales, antes de sumarse a la columna de refugiados. Nagorno Karabaj, de mayoría armenia y cristiana, hizo secesión de Azerbaiyán, de mayoría musulmana, durante la desintegración de la Unión Soviética. Desde entonces los armenios de este territorio, que contaron con apoyo de Ereván, estuvieron enfrentados al poder de Azerbaiyán, y libraron dos guerras, una entre 1988 y 1994 y la última a fines de 2020, en la que perdieron varios territorios