En su primera visita a Kiev, el presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, prometió este sábado 15 de julio ampliar a 150 millones de dólares su ayuda humanitaria y de equipamiento militar no letal.

Seúl ampliará la escala de suministros con respecto al año pasado: la ayuda se incrementará a 150 millones de dólares mientras que en 2022 Ucrania recibió 100 millones de este país.

Corea del Sur, noveno mayor exportador de armas del mundo, tiene una política de larga data de no entregar armas a zonas donde hay conflictos activos y ha mantenido este principio pese a las reiteradas peticiones de Estados Unidos, las potencias europeas y de Ucrania.

Zelenski agradeció al presidente surcoreano el gesto de visitar por primera vez al país en guerra y el envío de vehículos y equipamiento de desminado que "ayudaron a salvar muchas vidas", dijo.

"La Ucrania de ahora me recuerda a la Corea del Sur del pasado", afirmó Yoon, elogiando la ayuda internacional que permitieron que su país "lograra una victoria milagrosa" frente a Pyongyang y se convirtiera en una de las mayores economías del mundo.

Seúl, que técnicamente sigue en guerra contra Corea del Norte, produce grandes volúmenes de armamentos que son compatibles con los equipos que usa la OTAN.

Esta potencia asiática tiene una política de larga data de no entregar armas a zonas donde hay conflictos activos y ha mantenido este principio pese a las reiteradas peticiones de Estados Unidos, las potencias europeas y de Ucrania.