Hasta el lunes 15 de abril, estaba previsto oficialmente que la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de París 2024 tuviera lugar únicamente en el rio Sena, con la vaga idea de que se estaban estudiando otras posibilidades. En una visita al Grand Palais de París, que acogerá pruebas olímpicas este verano, en presidente de Francia, Emmanuel Macron, aseguró que se están estudiando planes B y C en caso de amenaza terrorista.

A cien días de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de París, el Presidente de Francia, Emmanuel Macron, trató este lunes de tranquilizar a todo el mundo asegurando que la ceremonia de apertura se celebrará en el rio Sena, al tiempo que esbozaba por primera vez "planes B y C" en caso de amenaza terrorista. Esta ceremonia de apertura a lo largo del río de la capital el 26 de julio "es una primicia mundial. Podemos hacerlo y lo haremos", declaró el Presidente francés en una entrevista al canal francés BFMTV y la radio RMC, desde Grand Palais de París.

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Anteriormente, Macron había asegurado que se estaban estudiando escenarios alternativos. Pero, por primera vez, empezó a detallarlos. "Analizaremos los riesgos en tiempo real", añadió. Entre las opciones alternativas figura una ceremonia "limitada en Trocadero" (al frentre de la Torre Eiffel), o incluso "trasladada de nuevo al Estadio de Francia", "porque es lo que se hace tradicionalmente". Hasta ahora, el Ejecutivo había descartado un traslado de nuevo al Estadio de Francia, que acoge las pruebas atletismo y de rugby a siete.

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Un perímetro de seguridad "muy amplio”

No obstante, Emmanuel Macron quiso tranquilizar a la opinión pública sobre el dispositivo de seguridad para el escenario fluvial, que sigue siendo la opción preferida. "Nos hemos anticipado a la situación y hemos establecido un perímetro de seguridad muy amplio, en el que controlaremos a todas las personas que entren y salgan", insistió. También se ha reducido el tamaño del festival: el número de espectadores que pueden asistir gratuitamente se ha reducido de 500.000 a 222.000. Incluyendo a los que han pagado su asiento al pie de los muelles, debería haber unos 320.000 en total.

En el lanzamiento de la cuenta regresiva para la ceremonia de apertura de este acontecimiento mundial, y con las nubes acumulándose en la escena internacional, el Presidente también intentó reforzar el valor diplomático de los Juegos. Francia "hará todo lo posible para que haya una tregua olímpica", declaró, prometiendo trabajar en ello con el Presidente chino, Xi Jinping, en particular. "Le pedí que me ayudara", añadió, confirmando de paso que vendría a París "en unas semanas". Se le espera a principios de mayo, según fuentes diplomáticas. En noviembre, la Asamblea General de la ONU pidió que este verano se respetara la tradicional "tregua olímpica".

Con esta entrevista y esta nueva revisión del recinto tras la inauguración de la Villa Olímpica, y el Centro Acuático Olímpico, Macron espera reavivar el entusiasmo de los franceses para las justas. Un sondeo de Ipsos, publicado en un dominical llamado La Tribune Dimanche, muestra que sólo el 53% de los franceses se declara "interesado" por los Juegos, ocho puntos menos que hace seis meses. Peor aún, la mayoría de los encuestados se declaran "preocupados" por la capacidad de Francia para garantizar el buen desarrollo de los Juegos.

"Redescubrir" el Grand Palais

"Francia es un equipo, es una nación unida, y estaremos ahí para dar ejemplo", ha respondido Emmanuel Macron, asegurando tener "confianza en los sindicatos" en un momento en el que algunos amenazan con una serie de huelgas durante los Juegos. "Tienen un espíritu de responsabilidad y estarán de nuestro lado", dijo.

Después de la entrevista, el presidente Macron visitó las obras del Grand Palais, en renovación desde 2021, donde se celebrarán las pruebas de esgrima y taekwondo. La entrega de las obras al Comité Organizador de los Juegos Olímpicos está prevista para el viernes. "Este nuevo proyecto del Grand Palais, con un presupuesto de unos 500 millones de euros, abarca los 77.000 m2 del recinto, las galerías, los exteriores, la gran nave y el Palais de la Découverte", explica el Elíseo.

La restauración completa del recinto, construido para la Exposición Universal de 1900, debería estar terminada en la primavera de 2025 para el Grand Palais, cuando está previsto que vuelva a abrir sus puertas al público, y en 2027 para el Palais de la Découverte.

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