Rutte se convirtió este martes en el nuevo secretario general de la OTAN, y prometió que Ucrania seguirá siendo una prioridad para la alianza transatlántica, más allá del resultado de las elecciones presidenciales en Estados Unidos.
Con Esther Herrera, corresonsal de RFI en Bruselas
Mark Rutte es ya el nuevo secretario General de la OTAN, después de que el noruego Jens Stoltenberg haya ocupado el cargo durante 10 años.
El político holandés llega al mando de una Alianza completamente distinta. Aun así, las prioridades no van a cambiar: la ayuda a Ucrania se va a mantener, aumentar la producción de armamento, y seguir la defensa de sus miembros ante amenazas como Rusia y las complicadas relaciones con China.
Vamos a "intensificar nuestro apoyo a Ucrania y acercarla cada vez más a la OTAN, porque no puede haber seguridad duradera en Europa sin una Ucrania fuerte e independiente", dijo Rutte tras tomar formalmente el mando en una ceremonia en Bruselas.
Rutte tendrá que estar atento también en mantener unida a la Alianza. Por lo pronto, tiene otros desafíos inmediatos, como el cambio en la Casa Blanca. Ha recordado que ya ha trabajado con Donald Trump, y que su empeño llevó a los países a ser más conscientes en gastar más en Defensa, también cree que la cooperación con Kamala Harris será buena si esta es elegida. Aun así, las posturas de ambos mandatarios sobre la Alianza, no es ningún secreto, difieren notablemente.
Rutte se enfrenta al reto en un mundo geopolíticamente mucho más complejo. Pero el holandés está curtido en las negociaciones difíciles después de 15 años como primer ministro necesitará todas las herramientas en su nuevo puesto.
Desde Kiev, el presidente ucraniano Volodimir Zelenski apuntó que quiere trabajar "eficazmente" con el nuevo secretario general para que Kiev se acerque a la ansiada adhesión a la Alianza.
Ya al llegar este martes a la sede de la alianza militar, en Bruselas, Rutte apuntó que la OTAN precisa asegurar "que Ucrania se imponga como nación soberana, independiente y democrática" frente a la invasión rusa iniciada en febrero de 2022.
Los países de la alianza aportan el 99% del armamento extranjero a Ucrania, y acordaron en julio desempeñar un papel aún más importante en ese proceso, siendo Rutte quien tendrá que coordinar ese apoyo.
Rutte desestimó que el resultado de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, previstas para noviembre, sean un motivo de preocupación y confió en poder trabajar productivamente con quien gane.
Líbano
Este martes, el nuevo secretario general de la OTAN dijo que la situación en Líbano supone una "preocupación evidente", pero admitió que la alianza militar no tiene ningún rol que jugar en esa situación.
"Estamos siguiendo de cerca lo que está sucediendo en el Líbano. Pero la OTAN no tiene ningún papel específico en ese sentido. Como alianza, estamos en contacto constante con todos nuestros socios" de la región, expresó.
Otro de los desafíos de Rutte en la OTAN será mantener la presión a los países de la alianza para que aumenten su gasto en Defensa.
Este año, 23 de los 32 países del bloque alcanzarán la meta de invertir en Defensa el equivalente al 2% de sus respectivos PIB.