Miles de seguidores del exmandatario boliviano Evo Morales reclamaron el martes en varias localidades la renuncia del presidente, Luis Arce, como condición para levantar los cortes de rutas que bloquean hace dos semanas el país. Los enfrentamientos entre policías y manifestantes se concentraron en Mairana, en el departamento oriental de Santa Cruz, y dejaron un saldo de 30 heridos.
A palos y pedradas… Así ha acabado la última protesta en Bolivia contra el actual gobierno de Luis Arce y en apoyo al expresidente Evo Morales.
La manifestación ha dejado decenas de heridos; la mayoría son efectivos policiales, aunque también hay manifestantes.
Los incidentes han ocurrido en Mairana, en el departamento oriental de Santa Cruz. Este es uno de los múltiples puntos bloqueados por los campesinos, que desde hace dos semanas cortan el paso por las principales carreteras con piedras.
"Nos tiraban piedras, palos e incluso detonaban cilindros de dinamita"
– Reportero herido durante la protesta
"Hasta que no renuncie, vamos a seguir movilizados", denunció, por su parte, un agricultor presente en la protesta.
La mayoría de los manifestantes son partidarios del expresidente Morales, que piden la renuncia del actual dirigente Luis Arce por supuesta "persecución judicial" contra su líder. Morales está siendo investigado por un caso de estupro agravado y tráfico de personas.
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La tensión aumentó bruscamente el domingo, cuando el exmandatario denunció un intento de asesinato, del que responsabilizó al actual Gobierno.
En estas dos semanas de protestas, se han bloqueado más de 20 carreteras en todo el país y ya hay cerca de medio centenar de manifestantes detenidos.